La semana pasada comenzaban en Ourense ciudad los encuentros de lo que se ha denominado como “el pacto de la concordia”, donde el PSOE intenta liderar un acuerdo con PP y BNG que fructifique en una moción de censura. Tras una primera toma de contacto la semana pasada, donde se conseguía establecer una cojín de negociación, las tres formaciones se citarán de nuevo en los próximos días para intentar avanzar en un acuerdo. Por el momento, singular de las 14 propuestas presentadas por los socialistas, solo ha trascendido el veto del BNG a que los populares recojan el muleta de mando.
Mientras este acuerdo no se fructifica, otras dos alcaldías miran a la haber de provincia, transmitido que en función de lo que allí ocurra, sus bastones de mando podrían cambiar de manos. Otros alcaldes han aprendido a mandar en minoría, y los pactos dotan sus municipios de cierta estabilidad. Tanto Barbadás como O Carballiño tienen gobiernos en minoría del PSOE. En ambas localidades están pendientes de las negociaciones de Ourense, puesto que un cambio en la haber de provincia podría afectarles.
El ballet
En el caso de Barbadás, Xosé Carlos Valcárcel gobierna apoyado por Democracia Ourensana (DO) y el Partido Galego (PG), que obtuvieron un escaño cada uno. “Somos oito, e un máis (el BNG) co que negociamos arduamente, con bos resultados. É o que ten a democracia”, afirma Valcárcel. Sobre cómo influirá una moción de censura en Ourense al concello de Barbadás, Valcárcel se muestra tranquilo. “Temos unha dinámica completamente diferente”, sostiene el regidor de Barbadás. “Cada concello ten a súa situación política e non deberían influír un noutro”, añade. El regidor se encuentra en la recta final de la tramitación presupuestaria, de la que dependen varias obras y reformas.
Una situación parecida se vive en Carballiño, donde existe un triple empante entre PSOE, PP y Espazo Popular, la formación fundada por el exlíder socialista Pachi Vázquez, donde cuentan con cinco ediles cada uno. El socialista Francisco Fumega gobierna desde hace un año en minoría y, según la examen, ha llevado al consistorio a una situación de parálisis. “O concello está paralizado e sen orzamentos”, reconoce desde Espazo Popular Pachi Vázquez, “e hai moito malestar entre os veciños. Dende a investidura, ofrecemos varias veces un paco de esquerdas, pero non fructificou”, continúa Vázquez, “así que este mércores hai un pleno extraordinario para reprobar ó corregidor e instar á examen a apañarse un goberno rotativo”.
Espazo Popular lleva negociando ese gobierno rotativo con el PP por lo menos desde el mes de abril, pero en los últimos días las conversaciones se han enfriado. Pachi Vázquez lo atribuye a las negociaciones de Ourense, poco que el portavoz popular carballinés, José Rafael Castro, niega. “Siempre tuvimos vía expedito para negociar en Carballiño”, asegura Castro. “Lo que esté pasando en Ourense no debería influírnos”, añade. Como portavoz, ha ofrecido a Fumega entrar a formar parte del gobierno municipal, y igualmente explorado un gobierno bipartiro con Espazo en Popular. “Estamos teniendo reuniones”, reconoce José Rafael Castro,”pero sin acuerdo final. Ofrecemos tanto apoyo desde la examen como entrar en un gobierno de concentración”, asegura el popular.
Los primeros
O Irixo fue la primera billete de la provincia donde hubo un cambio de gobierno tras una moción de censura durante el presente mandato. Desde agosto de 2023, Susana Iglesias (Xuntos polo Irixo) encabeza un gobierno bipartito yuxtapuesto al PSOE tras desalojar de la alcaldía al popular Manuel Cerdeira. “Se estamos aquí é polo descontento que había co corregidor previo”, asegura Iglesias. “Había moita débeda, desorganización, non se atendía ós veciños…foi a xente a que nos puxo”, añade la alcaldesa.
Para la regidora, las negociaciones que articularon el nuevo gobierno municipal “non foron fáciles. Houbo bastantes reunións e algúns tira e afrouxa. Agora temos unha relación cordial, e aínda que eu faría algunhas cousas doutra maneira, chegamos a entendementos”. El próximo miércoles, este gobierno bipartito aprobará inicialmente unos presupuestos municipales “continuistas cos que había, aínda que teremos que resolver algunha subvención”, asegura Iglesias.
Sin moción de censura en Viana do Tonto por yerro de acuerdo en la examen
Viana do Tonto fue otra de las localidades donde el resultado electoral propició un gobierno en minoría. El popular Andrés Montesinos, con cinco representantes, obtenía el muleta de mando en presencia de la yerro de acuerdo entre el PSOE y el BNG, que con tres ediles cada uno, conformaban la mayoría en el consistorio. Desde la investidura, son varias las ocasiones en las que socialistas y nacionalistas se han sentado a negociar en escudriñamiento de un gobierno bipartito, pero hasta el momento no han fructificado. Mientras tanto, el gobierno municipal “está gastando o remanente de maneira non efectiva”, en palabras de Germán García, portavoz del PSOE en Viana.
Respecto a la posibilidad de una moción de censura, García cuenta que “tivemos negociacións, e é moi complicado. O BNG esixe que a alcaldía sexa completa para eles, e nós queremos repartila nun goberno de tres e tres”, explica