A principios de año, Nikaury Martínez reabrió las puertas de la Cafetería Vilachá, su lugar de trabajo durante los últimos siete años, pero, dando un paso más firme en su vida, decidió hacerse responsable del local. “Siempre me gustó la industria hotelera. Empecé cuando tenía 16 años y, tras más de 10 años de experiencia, Finalmente me he convertido en mi propio jefe. “Estoy muy emocionada y deseando que llegue”, dice.
La Cafetería Vilachá, situada en el barrio del Couto, abre sus puertas todos los días a las 7:30 horas, cuando empieza a servir los primeros cafés de la mañana acompañados de tostadas con mantequilla y mermelada o tomate, aceite y jamón serrano, además de bollería y brochetas saladas como tortilla, lomo, bacon o jamón serrano. Durante todo el día es un buen lugar para tomar un descanso y disfrutar de un refresco o una cerveza en buen ambiente.
En el almuerzo o cena de manera informal, ofrecen un variedad de platos combinados que van desde pechuga, lomo adobado o fresco hasta filetes, bocadillos fríos y calientes, hamburguesas y raciones de zorza, calamares, cochino asado o morunos, todos ellos acompañados de patatas fritas.