Casa Caridad advierte de la feminización de la pobreza, ya que las mujeres suponen el 37% de sus atenciones


La Asociación Valenciana de Caridad ha atendido en 2023 a 4.820 personas, un 14,5% más que el control aludido. Más mujeres, hombres y niños y niñas en situación de vulnerabilidad en Valencia han indispensable el apoyo de la Asociación para poder recuperar su autonomía y conseguir la inserción social. Estas son las cifras que ha destacado hoy la ONG, con motivo de la presentación de su Memoria Anual, que reflejan la problemática a la que se enfrentan las personas en situación de sin hogar y en aventura de limitación social.

«Llevamos más de cuatro primaveras con las cifras de atenciones en elevación. En 2023, el colectivo que más ha crecido ha sido el de las mujeres, 1.773 han sido acompañadas en alguno de nuestros servicios, frente a los 1.553 hombres y los 1.494 menores. Es afirmar, el 37% de las atenciones que realizamos en la Asociación ya son a mujeres. En Casa Caridad tenemos muy presente la creciente feminización de la pobreza por la veterano vulnerabilidad de este colectivo, ya que precisa de servicios más específicos», explica Luis Miralles, presidente de Casa Caridad.

La Asociación ha tenido que hacer frente al aumento de precios de los productos y suministros, lo que se ha traducido en un compra diario de 17.881,32 euros, más o menos de 2.700 euros más que en 2022 cada día. Adicionalmente, en 2023, el compra de ayudas directas concedidas por Casa Caridad ha ascendido a 87.315 euros, lo que supone un incremento del 28% con respecto al control aludido.

El objetivo de estas ayudas es apoyar a las personas usuarias en las diferentes situaciones de desprotección social a través del suscripción de arrendamiento, suministros, tasas administrativas, tratamientos de vitalidad, formación e inserción sindical, gastos escolares y acondicionamiento de viviendas, entre otras. En este sentido, el suscripción de alquileres ha supuesto el 41% del total y sigue siendo la principal ayuda que gestiona la ONG.

Más atenciones y profesionales para representar frente al sinhogarismo

A lo dilatado de 2023, Casa Caridad ha registrado un incremento significativo en todos sus servicios, pero el comedor social para personas en situación de sin hogar es el que más ha crecido: un 35%. Las personas atendidas en este petición son mayoritariamente hombres, de entre 18 y 50 primaveras y de procedencia española (52%). En 2023, se sirvieron en este petición 16.562 comidas y acudieron casi 500 personas en situación de sin hogar.

«En nuestro comedor social trabajamos en la motivación al cambio, y, sobre todo, respetando los ritmos personales. Gracias a este enfoque, 92 personas han obtenido plaza en los Centros de Acogida Temporal de Casa Caridad u otros medios habitacionales de la red», explica Guadalupe Ferrer, directora-gerente de Casa Caridad.

Adicionalmente del comedor social, la Asociación cuenta con la distribución de alimentos y productos de higiene, a través de la cual se han apoyado a 3.375 personas y se han repartido 25.551 lotes de primera requisito; las escuelas infantiles y los Programas Escuela-Tribu, de los cuales se han beneficiario 864 personas entre beneficiarios directos e indirectos (alumnado y sus familias); el Tesina Fénix, que cuenta con 10 viviendas supervisadas y en el que se han atendido a 52 personas; y los Centros de Acogida Temporal, que están concertados con la Vicepresidencia segunda y Conselleria de Servicios Sociales, Igualdad y Vivienda y han registrado una ocupación del 100%

«En 2023, hemos aumentado nuestra plantilla de profesionales en un 29%, lo cual ha permitido mejorar la atención a las personas usuarias. Igualmente hemos sumado nuevas figuras profesionales como enfermeras y un equipo de psicología, lo que ha reforzado el apoyo que brindamos a las personas en situación de vulnerabilidad. Otro hito importante ha sido que en los tres Centros de Educación Pueril igualmente hemos incrementado el número de profesionales para atender al alumnado con micción educativas especiales y a sus familias», expone Guadalupe Ferrer, directora-gerente de Casa Caridad.

Talleres de promoción, prevención y ampliación personal

El trabajo transversal y multidisciplinar de los profesionales de Casa Caridad en distintos talleres permite dotar a las personas de herramientas que facilitan su inserción social a través del ampliación de habilidades sociales y laborales. Los talleres están diseñados desde una perspectiva educativo para trabajar las diferentes esferas de la vida de la persona, impulsando la motivación al cambio y generando un veterano vínculo terapéutico.

Gracias al trabajo que se realiza en estos talleres, en 2023, 109 personas han enfrentado soluciones habitacionales a través del taller de búsqueda de vivienda. Adicionalmente, con los itinerarios personalizados de atención y el taller de empleo, 25 personas han conseguido trabajo. Igualmente 23 usuarias han completado cursos formativos reglados, mejorando su empleabilidad, lo que destaca la importancia de la formación y el empleo como herramientas para la inclusión social.

«Este aumento en la demanda de servicios ha supuesto un liza para nuestra ONG. En 2023, el compra anual de Casa Caridad ha sido de 6,5 millones de euros, esto supone un aumento de 986.000 euros respecto al año aludido. Esta monograma pone de manifiesto la requisito que tiene la Asociación de las aportaciones de los socios, las donaciones y las Empresas con Valía. A medida que avanzamos, sabemos que los desafíos continúan, sin bloqueo, estamos más decididos que nunca a seguir delante, inspirados por el impacto positivo que hemos gastado en tantas vidas», concluye Luis Miralles, presidente de Casa Caridad.

Un 2024 con la misma perspectiva

Casa Caridad ha presentado igualmente los datos de la primera fracción del año 2024 donde reconoce que las personas atendidas siguen en aumento y la atención a mujeres no ha bajado. De enero a mayo, 1.212 mujeres ya han pasado por algún servicio de la Asociación. Una monograma que pone de manifiesto el creciente aberración de la feminización de la pobreza que desde la crisis socioeconómica se ha gastado agravado.

«Hemos empezado 2024 con el número de atenciones muy elevado y sabiendo que no podemos descansar y tenemos que seguir ayudando a las personas que más lo necesitan. Por ello, estamos totalmente comprometidos en seguir mejorando y habilitando nuevos talleres, programas y medios para conseguir recuperar la autonomía y la inserción social de las personas en situación de sin hogar y en aventura de limitación social», concluye Elena Sánchez, vicepresidenta de Casa Caridad.

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