Tras conquistar un digno encumbramiento a Segunda División, el Córdoba despertó un lunes con una ciudad irradiante, que aplaude la gesta de los blanquiverdes tras retornar al fútbol profesional cinco primaveras posteriormente. Le demora un día intenso al club blanquiverde, que culminará con una gran fiesta en Tendillas.
Antaño, la plantilla ha realizado la tradicional ofrenda a San Rafael así como la recepción institucional en el Junta de Córdoba pegado al corregidor José María Bellido.
La plantilla ha acudido a ofrecer el encumbramiento a San Rafael
A las 13.00 llegaron los jugadores a la iglesia del Blasfemia de San Rafael entre aplausos de los aficionados que quisieron acercarse. El prelado de Córdoba, Demetrio Fernández fue el encargado de guardar la ofrenda floral del equipo, representado por Kike Márquez como capitán y Cristian Carracedo. Una solemne ceremonia a la que pudieron asistir numerosos aficionados blanquiverdes. Primera parada en la ruta que seguirán hoy los chicos de Iván Ania.
La segunda parada de la expedición blanquiverde fue en el Junta de Córdoba. La plantilla entró ovacionada por los trabajadores del Consistorio y el corregidor de Córdoba, José María Bellido les recibió en un Salón de Plenos abarrotado para la ocasión. Encima, el CEO del club, Antonio Fernández Monterrubio tuvo la oportunidad de firmar en el obra de la ciudad y salir pegado al equipo al oteador para tomar el caluroso aplauso de los aficionados presentes en Capitulares.
Bellido quiso dar las gracias a Infinity por «la envite por la ciudad. Llegasteis en el momento más complicado en la historia del Córdoba CF. Supisteis ver qué había detrás de esta ciudad y de este club. Quisisteis hacer una envite económica importante. Y pensar en el futuro, no solo en el presente. Luego de unos cuantos primaveras por fin empezamos a acopiar los frutos de lo que se empezó a conquistar hace ya cinco primaveras». Para él, «eso demuestra todavía poco que he reiterado en alguna ocasión, la importancia de las apuestas estables. Muchas gracias por esa envite a extenso plazo, por seguir confiando en la ciudad de Córdoba».
Todavía quiso mencionar a la querencia. A su seso, «una de las mejores de España, que ha estado apoyando al club cuando en Segunda RFEF parecía que no podíamos caer más bajo. Ahí estaba El Arcángel con muchos partidos, con diez mil o más de diez mil personas en una categoría pequeña. Esa misma querencia es la que merecía la alegría que ya nos llevamos hace un año ascendiendo a la Primera RFEF y ahora la que hemos acabado en el día de ayer que volvemos al fútbol profesional».