La Inspección Técnica de Vehículos, conocida como ITV, es una revisión lícito preventiva de mantenimiento con la que se certifica que un transporte cumple con las normas de seguridad y con las de emisiones contaminantes.
Este requisito se exige para poder circular por la red de carreteras en la mayoría de países de la Unión Europea y en algunos del continente indiano como Estados Unidos, México o Colombia.
Esta inspección es obligatoria para todos los vehículos y una vez realizada, al conductor se le da una ficha o polímero de inspección técnica y una pegatina, que se debe pegar en el extremo superior del costado del copiloto de la cristalera delantera.
¿Qué ocurre si se circula sin la pegatina?
La pegatina de la ITV es un distintivo obligatorio que debe estar visible, de lo contrario, el dueño del transporte deberá respaldar una multa leve de 80 euros. Si lo que no se tiene en posesión es la polímero de inspección técnica, la multa ascenderá a 60 euros, considerándose infracción leve.
¿Cada cuánto tiempo hay que ocurrir la ITV?
La Inspección Técnica de Vehículos hay que pasarla con una periodicidad diferente en función de la decrepitud del coche. Durante los primeros 4 abriles del transporte, no será necesario realizar la ITV, luego, entre los 4 y los 10 abriles, se deberá venir a ocurrir la revisión cada dos abriles. Cuando ya se excedan los 10 abriles, la prueba se realizará una vez al año.
¿Qué pasa si la ITV está caducada?
Circular con la ITV caducada está considerado como una infracción muy arduo, con ese transporte estaría prohibido circular y la multa puede ascender hasta los 200 euros. Incluso si el transporte tiene un percance con la ITV caducada, el seguro puede no hacerse cargo de los gastos del siniestro.
Si el transporte ha pasado la inspección del transporte, pero el resultado ha sido desfavorable (si hay un defecto arduo que necesita que el transporte pase por el taller para subsanarlo) o placa (los problemas son tan graves que inmovilizarán el automóvil), la multa alcanzará desde los 60 a los 500 euros.
Si la ITV es negativa, el transporte no se puede movilizar y debe ser una torno quien lo transporte hasta el taller, una vez arreglado, otra torno lo volverá a padecer a ocurrir la ITV, si esto se incumple, la multa será de 500 euros.
Si la segunda inspección volviese a ser negativa o desfavorable, el transporte debe ser trasladado de nuevo al taller y ser examinado en un plazo lícito mayor de dos meses. Si esto se llegase a incumplir, la paquete sería de 500 euros y se daría de herido el transporte.
