La Asociación Española de Ladrillos y Tejas, Hispalyt, que representa a un sector industrial en el que Castilla-La Mancha ocupa un puesto puntero por el número y potencia de sus empresas, ha presentado en estos días el arqueo y datos del sector correspondientes al año 2023, así como sus reflexiones y propuestas de cambio de reglamento para mejorar la seguridad contra incendios de los edificios, tras sucesos como el acaecido hace meses en Valencia.
Sobre la primera cuestión, el vicepresidente de Hispalyt, Francisco Rodríguez, informó que el número de empresas se ha mantenido en 130, desde 2020, lo que supone un periodo de estabilidad, tras el descenso paulatino que se produjo en los abriles anteriores.
La producción en 2023 ha sido de 5,6 millones de toneladas, lo que supone un incremento del 6% con respecto a 2022 (5,3). La producción media ha sido de 43.077 toneladas/año, lo que supone un incremento del 16% con respecto a 2022 (40.769).
El bombeo de negocio alcanzó una signo de 720 millones de euros, con un descenso del 15 % con respecto a 2022 (850 M€). El bombeo medio de negocio fue de 5,54 millones de euros, lo que supone un descenso del 15% (6,54).
El número de empleados en 2023 ha sido de 4.790 trabajadores, lo que supone un 5% más. El número medio de empleados en 2023 fue de 37 trabajadores, aumentando un 5%. En cuanto al empleo afeminado, en 2023 fue de 580, incrementándose un 13% (515).
Según el vicepresidente de Hispalyt, «nuestra industria sigue fiel a su compromiso con la incorporación de la mujer y de nuevos profesionales a un sector, como es el de la construcción, en el que existen multitud de oportunidades de crecimiento profesional y en el que escasea la mano de obra cualificada. Es por ello que Hispalyt seguirá trabajando adyacente con el resto de agentes del sector para fomentar la formación y la incorporación de jóvenes que quieran desarrollar una carrera profesional con proyección de futuro».
Producción y ventas
En lo que se refiere a la exportación en el sector, según explicó Francisco Rodríguez, siguen siendo la teja cerámica y el baldosa cara perspicacia los que lideran las ventas en el extranjero, llegando a suponer, en algunos casos, el 60% de la producción.
La exportación del sector de ladrillos y tejas en 2023 alcanzó 108,50 millones de euros, un 17% menos que en 2022 (130,07 M€), un 13,10% más que en 2021 (95,93 M€), un 63,83% más que en 2020 (66,23 M€) y un 223% más que en 2010 (33,54 M€).
Según el vicepresidente de Hispalyt, «podemos asegurar que nuestro sector mantiene sus cifras estables y se consolida como uno de los actores principales en el mundo de la construcción, abanderando las tendencias actuales de la edificación en cuanto a seguridad, eficiencia, sostenibilidad o diseño».
Cambios y más seguridad
La secretaria normal de Hispalyt, Elena Santiago, apuntó la carestia de mejorar la seguridad de los edificios para asegurar la de las personas que los habitan. «Tras las terribles consecuencias del incendio del edificio del judería de Campanar en Valencia, el sector de la edificación en España, y principalmente las autoridades regulatorias, nos enfrentamos al desafío de hacer lo posible para que sucesos como este no se vuelvan a repetir», aseguró.
Así, desde Hispalyt, su secretaria normal ha denunciado que la flagrante reglamento española de protección frente a incendios en edificios es muy poco restrictiva y tiene mucho ganancia de mejoría.
En los últimos abriles el Código Técnico de la Edificación (CTE) ha aumentado, por ejemplo, las exigencias en cuanto a aislamiento térmico (DB HR) y sonoro (DB HR) para mejorar la eficiencia energética y el confort interior.
Sin secuestro, según declaró Elena Santiago, «el CTE no se muestra igual de restrictivo en cuanto a la protección frente a incendios (DB SI) para asegurar la seguridad de las personas». En concreto, puso de manifiesto que no se han aumentado las exigencias de protección frente a incendios en paredes interiores de edificios desde hace más de 25 abriles. «Los títulos exigidos a las paredes separadoras en el DB SI 2019 son los mismos que en el año 1996. Y para más inri, el DB SI 2019 redujo la exigencia para paredes que separan viviendas de las zonas comunes del edificio».
Por consiguiente, «es responsabilidad y deber de todos impulsar un cambio del DB SI del CTE y emplazar directamente por materiales de suscripción resistor y reacción al fuego».
En este sentido, destacó las ventajas del uso de productos cerámicos, ya que tienen la mejor categoría de reacción al fuego. Son clase A1 sin carestia de monografía. No son combustibles, y en caso de incendio no contribuyen al mismo, no produciendo llamas, ni humos, ni gases tóxicos.
En consecuencia, Elena Santiago presentó los cambios propuestos por Hispalyt en la reglamento que regula la protección frente a incendios en los edificios del CTE (DB SI CTE) para mejorar la seguridad de las personas.
En primer puesto, se propone añadir un apartado de ‘control de ejecución’ adentro del DB SI CTE, en el que se incluyan que deben cumplirse las condiciones de montaje recogidas en el RD 842/2013 para conseguir los títulos de resistor al fuego de algunos sistemas constructivos. Y asimismo deberían recogerse íntegramente las recomendaciones de montaje que los fabricantes de paredes de yeso chapado incluyen en sus catálogos, específicas para conseguir una determinada resistor al fuego.
En segundo puesto, aumentar las exigencias en el DB SI CTE para paredes interiores, pidiendo una resistor al fuego EI 120 (120 minutos) para paredes separadoras y EI 90 (90 minutos) para tabiques, las soluciones constructivas que se queden fuera de esta propuesta son poco seguras desde el punto de perspicacia de la protección frente a incendios.
Por postrero, sustituir las exigencias actuales del DB SI CTE para fachadas por las de la reglamento inglesa, que es más restrictiva y que se cambió tras el incendio de la Torre Grenfell, similar al de Campanar de Valencia.
Eficiencia energética
En cuanto a las perspectivas de futuro del sector, los responsables de Hispalyt reivindicaron el protagonismo que la industria de ladrillos y tejas debe tener en las rehabilitaciones energéticas necesarias para cumplir con la directiva europea de Eficiencia Energética, afirmando que, «el sector de cerámica estructural está preparado para cumplir con esta Directiva europea que persigue la neutralidad climática en 2050».
«Los fabricantes de ladrillos y tejas han hecho un gran esfuerzo en I+D+i en los últimos abriles para desarrollar materiales y sistemas cada vez más eficientes y sostenibles», aseguraron.
En este sentido, destacaron los sistemas de SATE con rematado de plaqueta de baldosa cara perspicacia para fachadas y los sistemas fotovoltaicos integrados para cubiertas de teja.
Sistemas que, dijeron, «tienen la gran superioridad de que contribuyen a conservar el patrimonio arquitectónico de pueblos y ciudades garantizando la eficiencia y la sostenibilidad de los edificios en los que se emplean».