El conflicto por la admisión de 13 alumnos en el IES Otero Pedrayo procedentes de los centros Irmáns Villar, Amadeo Barroso e Inmaculada ha entrado en su escalón más destacamento, denominada como “Período 6” por las Asociaciones de Nais e Pais de Alumnos (ANPAs) de los centros afectados. Este prolongado conflicto, que ya lleva casi dos meses, volvió a prosperar ayer con una nueva protesta frente a la delegación de la Consellería de Educación en Ourense.
El 8 de julio es la época crucial, ya que ese día se realizará la asignación definitiva de plazas para el curso 2024-2025. Si las peticiones de las familias no son atendidas, los estudiantes afectados deberán averiguar otros centros para comenzar la educación secundaria. Carlos Regueiro, portavoz del ANPA del Irmáns Villar, responsabilizó a la consellería, afirmando que “no han hecho su trabajo”. Por otra parte, criticó que tras solicitar una reunión con el conselleiro, fueron remitidos al cabecilla de capital humanos, Jose Manuel Álvarez Bertolo, quien según Regueiro se declaró muy ocupado.
Regueiro igualmente denunció las tácticas de división empleadas por Jorge Sampedro, director territorial de Educación en Ourense, quien según él convocó a los padres individualmente, intentando debilitar su dispositivo y forzar su rendición por cansancio.
Beatriz Estévez, una de las madres afectadas, explicó la situación crítica que enfrentan los estudiantes: “Comenzarán a vocear a partir del 8 de julio, pero el problema es que hay 90 plazas disponibles para secundaria y llegan 125 alumnos“. Esta desliz de plazas genera un cuello de botella todos los primaveras, sin que se haya opuesto una posibilidad efectiva hasta el momento, según Estévez.
Los padres continuarán con sus concentraciones el próximo martes, 2 de julio, aumentando la presión a medida que se acerca la época meta para la asignación de plazas.