El aumento de los precios es una tendencia imparable para apropiarse o traspasar una vivienda en España. Ese incremento se convierte una subida exponencial cuando se analiza el coste de la segunda residencia vacacional en la costa de Andalucía, objetivo prioritario de los cordobeses, una provincia de interior, que buscan ocio de sol y playa.
El precio medio en los municipios con margen de las 22 provincias españolas que tienen costa registra una subida interanual del 5,7 por ciento en el primer trimestre de 2024 (4,1% fue en el año precedente), según los últimos datos oficiales analizados por la Tinsa Research, la sociedad de tasación más importante del país. El aumento del precio medio en los últimos abriles (2020-2024) desde el estallido de la pandemia se sitúa ya en el 3,4 por ciento (2,8% hace un año).
En los primeros tres meses de 2024, el precio medio de la vivienda destinada exclusivamente a segunda residencia en los municipios costeros de España se sitúa en los 2.650 euros por medida cuadrado, lo que representa una subida más importante aún del 3,9 por ciento. Son 100 euros más por medida cuadrado que hace 12 meses.
El incremento del precio se ha legado en prácticamente las 22 provincias con costa de España. Los mayores precios de la vivienda vacacional se sitúan en las Islas Baleares, lo que está afectado al sector de primera residencia. En el top 3 además están Málaga y Cádiz, dos provincias que afectan directamente a la capacidad de importación de los cordobeses por su cercanía al destino turístico de sol y playa desde nuestra provincia de interior.
Los cordobeses que no quieran comprar una segunda residencia en la costa, pero sí deseen traspasar un morada para verenear siquiera tienen un marco muy positivo. El incremento del precio de los alquileres vacacionales en los municipios de costa además es muy trascendente en el postrer año, según Tinsa. El aumento del arrendamiento vacacional ha sido del 8,9 por ciento internaual en el primer trimestre de 2024. Ni siquiera la levísima moderación de descender de los dobles dígitos del año pasado (subida del 11 por ciento) permite ver un marco jovial en los precios de los alquileres de ocio.
La costa andaluza
Los cordobeses centran mayoritariamente su actividad de importación de segunda vivienda vacacional o el arrendamiento para veranear en la costa andaluza. El panorama de los precios en las cinco provincias con margen en Andalucía provoca que los cordobeses se enfrenten a una intensa subida de precios. Las cinco provincias andaluzas con costa, entre ellas Málaga, Cádiz, Almería y Mingrana, han aumentado el precio de la vivienda vacacional en el postrer año, según Tinsa, con la única excepción de que se mantiene el coste (pero siquiera víctima) en Huelva.
Curiosamente, la peor situación en cuanto a precios se da en Málaga, en la Costa del Sol, que es el destino más cercano y más demandado por los cordobeses en el apartado de la segunda residencia. En este caso, la subida de los precios roza el 10 por ciento interanual.
El precio de la vivienda vacacional en la costa malagueña es de 3.700 euros el medida cuadrado, lo que supone un incremento de 300 euros respecto al año pasado. El precio medio de una vivienda en los municipios costeros es de 2.290 euros y 2.160 el precio en toda la provincia. Es asegurar, la vivienda vacacional de la Costa del Sol vale 1.500 euros más que el resto de media. Está entre las más caras de España. Entre Marbella y Manilva, con 4.000 euros el medida cuadrado, está la zona más costosa para apropiarse una segunda residencia de la Costa del Sol.
Una situación muy parecida se da en Cádiz, además muy habitual zona de importación o arrendamiento para los cordobeses, como de sevillanos y madrileños. La Costa de la Luz, como la del Sol, ha superado ya el borde de los 3.000 euros el medida cuadrado para la importación de una segunda residencia para uso vacacional. En concreto, llega a 3.100 euros. Estaba en 2.400 euros hace un año. La subida ha sido de 700 euros.
En este caso, el precio medio de la segunda residencia vacacional en la costa gaditana duplica el precio universal, que está en 1.625 euros en la primera vivienda en municipios de costa y 1.630 euros en toda la provincia. La zona más cara está situada entre Chiclana y Puerto Efectivo, donde alcanza los 4.150 euros. Además se dispara a 3.400 euros en Sotogrande.
Mingrana, con una límite de costa muy pequeña, además presenta aumento del precio de la segunda residencia. Ya está en la barrera psicológica de los 2.000 euros el medida cuadrado. Son 100 euros más que hace tan pronto como un año. Aquí la primera vivienda en el margen tiene un valencia medio de 1.386 euros y de 1.236 en la provincia. Son, por consiguiente, entre 700 u 800 euros más de media. Almúñecar, Motril y Salobreña tienen precios medios muy parecidos, entre 1.500 y 1.350 euros.
Almería está en una situación similar a la Costa Tropical granadina. En la Costa de Almería, el precio medio de la residencia vacacional es de 2.100 euros el medida cuadrado. Son además 100 euros más de subida interanual. Aquí los precios de las viviendas vacacionales duplican los de la primera residencia en los municipios costeros (1.187 euros) y de la provincia (1.234). La zona más cara del margen almeriense es entre Níjar y Aguadulce, donde llega a 2.400 euros.
Sólo Huelva consigue contener los precios medios de la segunda residencia en las costas de Andalucía. En su caso, el valencia medio se mantiene en los 1.800 euros de hace un año. Son 500 más de media que en la provincia o municipios costeros. Las zonas onubenses de playa tienen títulos estables de coste entre Mazagón e Islantilla (1.750 euros) y entre Isla Cristina y Ayamonte (1.800 euros).