Cada día escuchamos también que las empresas no encuentran trabajadores para sus actividades, ya sean manuales o incluso científicas. Es un problema grave, sin duda, y lo es porque, salvo excepciones, no hay mucha voluntad de incorporarse al puesto de trabajo, con todo lo que eso conlleva.
Una sociedad que tiene una fuerza laboral cada vez más envejecida no puede soportar mucho porque están pensando en la jubilación. No durará mucho si no se garantiza una gran fuerza laboral desde abajo. Y no se ve por ninguna parte. El problema está empeorando y la solución no está cerca. Mal día para introducir este debate, sin duda, porque hoy lo más importante es que se han puesto a funcionar los auriculares en el Congreso de los Diputados para que sus señorías se entiendan. Incluso si no los entendemos.