El partido ultraderechista Agrupación Franquista (RN) de Marine Le Pen ha manada la primera revés de las elecciones legislativas francesas con un 34% de los votos. La trofeo se produce claramente por delante del Nuevo Frente Popular de izquierda (NFP) y del coalición macronista.
Marine Le Pen, líder de Agrupación Franquista, ha pedido para la segunda ronda del 7 de julio “una mayoría absoluta” que permita dirigir a Jordan Bardella sin las trabas del presidente francés, Emmanuel Macron.
“Hay votantes que no se sentían representados con la coalición de izquierdas”
Manuel López Linares, profesor de Relaciones Internacionales en la Universidad Pontifica de Comillas, analiza en Espejo Manifiesto este mejora de la ultraderecha en Francia. Señala que los resultados “no han sido ninguna sorpresa porque se han cumplido los sondeos como se preveían”.
Apunta el hábil que Marine Le Pen ha querido ‘desdiabolizar’ su partido político y cambiar a un voto más moderado del que tenía. Cree López Linares que la parentela cuando está sufriendo una pandemia, confinamientos, crisis económicas o dificultades en el sector rural cambia la forma de pensar. “Al proyectar un frente artesano con partidos moderados hay votantes que no se sienten representados con esa coalición que se ha formado en 4 días desde la convocatoria electoral”, destaca.
“En Francia se vive una situación muy similar a la italiana”
Cree que la razón principal del éxito de Jordan Bardella es que ha hecho una buena campaña política y adicionalmente no había tocado poder en mucho tiempo y ahora les toca a ellos. “Es una situación muy similar a la italiana”, apunta.
Explica que Jordan Bardella es un producto de Marine Le Pen que “se ha sabido mover en los medios de comunicación y las redes sociales”. Sobre las maniobras del flagrante presidente de la República francesa Emmanuele Macron, cree que si no convoca ahora elecciones se hubiera antitético con una situación similar en otoño. “El sistema político francés es mas similar a los sistemas del continente latinoamericano donde hay jefes de Estado con poderes ejecutivos pero no todos. Tiene una asamblea que puede disolver cuando considere pero a la vez le puede presionar a convocar elecciones y eso parece que iba a ocurrir en octubre”, destaca.
Apunta que Macron está intentando guardar la presidencia porque es donde más daño pueden hacer a la Unión Europea. “Si tiene que ofrendar poco igual es esta situación que se le está planteando. El poder parlamentario con parte del Ejecutor que lleva en sus manos el primer ministro”, apunta.
Destaca adicionalmente que si Jordan Barella gobierna un par de abriles ya no pueden ir con la excusa de que no han tocado nunca poder. “Para determinar que esto ha sido un error hay que ver los resultados finales“, concluye.