Tras la asesinato del conocido actor, Matthew Perry, han desencajado a la luz unos documentos judiciales que revelan el patrimonio que poseía. Ha sido The US Sun quien ha tenido acercamiento a estos archivos. De hecho, ha confesado que la sigla de su patrimonio es más elevada de lo que se esperaba. Siendo entonces de 1.490.000 euros, al momento de su fallecimiento.
Estos documentos todavía ponen de manifiesto que Matthew no poseía ninguna propiedad inmobiliaria en el momento de su asesinato. Pero, en cambio, esta sigla sí que se suma a los 120 millones de dólares que ya había en su fideicomiso.
Los herederos
El actor dejó en su testamento que los beneficiarios de su herencia son: su padre John Perry, a su causa, Suzanne Morrison, a su hermanastra, Caitlin Morrison, y a su expareja, Rachel Dunn.
Perry no estaba casado ni tenía hijos. De hecho, en el propio testamento ha recalcado lo subsiguiente: “Siquiera me ocupo intencionalmente de ningún hijastro o hijo adoptivo que tenga ahora o que pueda tener más delante”.
¿Cómo murió Matthew Perry?
El conocido actor de la serie Friends murió a los 54 primaveras, el 28 de octubre de 2023. Lo encontraron abrumado adentro del jacuzzi de su casa en Los Ángeles.
Según la necropsia, la causa de la asesinato se centra en los artículos de la ketamina. Al parecer, el actor consumió una suscripción dosis de esta droga que consumía como terapia de infusión para tratar la depresión y ansiedad que sufría. Al parecer, la ketamina tiene usos médicos y quirúrgicos como anestésico y todavía se la conoce como droga recreativa. Igualmente puede tener artículos alucinatorios y psicodélicos de corta duración”.
No es novedad que el actor consumiese drogas y bebida, de hecho él mismo confesó que estuvo a punto de caducar por ello en varias ocasiones. Sin confiscación, llegó a desintoxicarse y tratar de ayudar a otras personas a superarlo. Sin confiscación, semanas a posteriori de la asesinato del actor, un amigo dijo que “nunca estuvo expedito” de drogas y que “mintió a todo el mundo” a cerca de ello.
Encima, Kayti Edwards, una expareja de Matthew dijo: “Matthew no era un fiestero casual y cuando estaba en plena yuxtaposición, daba mucho miedo”, “era como una aspiradora con cualquier cosa que pudiera conseguir, lo cual es muy peligroso”. Igualmente ha contado que trató de advertirle y ayudarle, pero que en esos casos no puedes obligarle a que lo deje.
En un principio, el caso se trató como un suerte, pero pronto surgieron varias incógnitas. Las autoridades abrieron una investigación para investigar cómo pudo obtener a la droga y cómo llegó a ingerir tanta cantidad.
A día de hoy, siguen estudiando si otras personas estuvieron implicadas.
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