Los delitos de odio crecieron en España en un 21,3% en 2023. Cuatro de cada 10 delitos están relacionados con el racismo y con la racismo. El tercer área de los delitos son los que tienen que ver con la ideología.
Espejo Manifiesto deje con una víctima de este tipo de delitos: Atenea Pérez. Atenea es maniquí y Miss universo 2023. Desde que salió elegida Miss Murcia ya empezó a cobrar ataques por su color de piel. Los comentarios destacaban que no parecía una chica murciana ni tenía una apariencia de española prototipo. Quienes la descalificaban nada más se fijaban en su color de piel y sus rasgos. Allá de venirse debajo por ese tipo de ataques, cuenta que usó esos insultos para empoderarse. Su padre es castellano y causa proviene de Guinea ecuatorial. “No soy menos española por no ser blanca, que es en lo que se fija la gentío”, señala.
“Muchas personas te señalan por tener otra procedencia”
Los ataques no se ciñen a las redes sociales y en la calle ha notado que le daban un trato diferente respecto a sus amigas. Lo que le molesta es que en la vida tiene que demostrar más por ser negra o ser mulata. “Siempre he notado que tenía que demostrar que era igual de válida que la gentío de cerca de”, señala. “Muchas personas te señalan por ser diferente, tener otra procedencia o tener otras raíces”, ha puntiagudo.
“El hombre comenzó a tratarme de zorra o extranjera”
Michelle es intérprete y incluso ha sido víctima por su condición de mujer trans y extranjera. Señala que no quiere ir de víctima aunque reconoce que fue “harto heavy” lo que le ocurrió y aún le toca ver a esa persona por las inmediaciones de su extrarradio. Disminución a pasear a su perrito a un parque cercano a su casa. Ya ayer había gastado a esa persona que la agredió, cuenta, pero una tinieblas el perro de este hombre comenzó a arriesgar con su perrita de una forma muy agresiva y ella le pidió que controlase al animal. “El tipo morapio y me dijo que tenía que mi perra tenía que ilustrarse a defenderse porque tenía que sacar un flanco animal”, señala.
Este hombre comenzó a tratarle de zorra y extranjera “y mil adjetivos que cada vez iban subiendo de nivel“. Pidió que le prestaran un teléfono porque no tenía móvil. Llamó a la Policía y esperó en este parque anejo a u atacante hasta que este intentó agredirla físicamente y abandonó el área.
Ella es natural de Perú pero nacionalizada española. Esta acostumbrada a esas reacciones porque ha representado a España en distintos concursos de belleza y a veces recibe ese ‘hate’. Como mujer tras, inmigrante e constituyente del colectivo LGTBI está acostumbrada. “A veces la gentío cree que llamándote así es poco malo. Creo que es ignorancia y que esas personas no son muy felices”, opina.
