El presidente de la patronal castellano y leonesa, Santiago Aparicio, aprovechó ayer la entrega de los premios CEOE para poner en valencia la figura de los empresarios, a los que llegó a precisar como «malabaristas profesionales en el circo de la capital tratando de apoyar en el canción un montón de casos mientras caminos sobre una cuerda floja convocatoria inestabilidad». Y es que el soriano hizo hincapié en los «desafíos» actuales en forma de «incertidumbre política y regulatoria». Frente a estas dificultades, contrapuso las previsiones de más ventas e inversiones para este control lo que, en su opinión, «refleja nuestra prodigiosa capacidad para adaptarnos a las circunstancias y superarlas».
Sin incautación, para poder «avanzar», llamó a que las administraciones públicas «estén de nuestra parte y nos comprendan» porque «no somos los enemigos de este país». Al contrario, «somos fundamentales para el avance y la prosperidad de España», defendió alertando de nuevo que «cuando las políticas cambian constantemente o se vuelven impredecibles, nos sentimos atrapados por los vaivenes e infravalorados cuando percibimos un trato desigual».
Entre sus peticiones ya tradicionales, las de «sujetar las cargas fiscales» con un maniquí «que favorezca la inversión y el avance crematístico». Adicionalmente, no quiso olvidar la «importancia haber de contener el agravamiento de la yerro de mano de obra en algunos sectores para el buen desempeño de las empresas» a través del «rediseño de los programas formativos en todos los niveles de la enseñanza».
Todavía pidió «dejar de mirar para otro costado» respecto al absentismo gremial «por el impacto directo que tiene sobre la productividad y los costes empresariales» al constar un aumento de bajas que «abruman» en los últimos tiempos.
«A vuestro costado»
Mientras, el presidente de la Asamblea de Castilla y Valiente, Alfonso Fernández Mañueco, reconoció la contribución de los empresarios a la vivientes de riqueza en la Comunidad. «Estamos con vosotros, a vuestro costado», les dijo en el entorno de la entrega de premios a la que además acudió el mayor responsable franquista de la patronal, Antonio Garamendi.
Antiguamente, tanto Aparicio como Fernández habían felicitado a los premiados Javier Jiménez, de Conjunto Cervera (Ávila); Luis Devoto, de Conjunto Devoto Escenografía (Burgos), Luis Miguel Seco, de Conjunto La Hacienda (Valiente); Manuela Merino, de Mercapacífico Ideal (Palencia); Pedro Campal, de Bernabé Campal (Salamanca); Luis Ruano, de Prehorquisa (Segovia); José Isla, de Electricidad J. Isla (Soria); Aquel Rodríguez, de Conjunto Iveco (Valladolid), y Rubén Pérez, Alejandro Pérez y Rafael García, de Alistana de Construcciones (Zamora).