Las verbenas, con sus flores vibrantes y su fragancia agradable, son una opción popular para añadir un toque de alegría a cualquier huerto o terraza. Son plantas relativamente fáciles de cuidar, lo que las hace ideales para jardineros principiantes y experimentados por igual.
Luz
Las verbenas son amantes del sol y necesitan al menos 6 horas de luz solar directa al día para florecer abundantemente. Si vives en un clima cálido, puedes proporcionarles sombra parcial durante las horas más calurosas del día para evitar que las flores se marchiten.
Un punto soleado en tu huerto o terraza, suelto de la sombra de árboles u otras estructuras, es ideal para las verbenas. Si no tienes un punto con suficiente luz solar directa, puedes considerar cultivarlas en macetas que puedas mover a diferentes ubicaciones a lo dilatado del día.
Las plantas con tallos alargados, hojas pálidas y poca floración pueden ser un indicio de que no reciben suficiente luz solar. Reubica las plantas a un punto más soleado o complementa la luz natural con iluminación fabricado.
Suelo
Las verbenas prosperan en suelos correctamente drenados, fértiles y tenuemente ácidos. Si tu suelo es arcilloso y pesado, puedes mejorarlo mezclándolo con arena o materia orgánica como compost o estiércol para aumentar el drenaje y la aireación.
Ayer de plantar, labra el suelo profundamente para aflojarlo y eliminar piedras o raíces. Incorpora materia orgánica como compost o estiércol para enriquecer el suelo y aportar nutrientes.
Riego
Las verbenas no toleran el exceso de agua, por lo que el riego debe ser moderado y adaptado a las condiciones climáticas y al tipo de suelo. En militar, un riego profundo una o dos veces por semana debería ser suficiente. Un riego profundo es mejor que riegos superficiales frecuentes. Riega directamente sobre la cojín de la planta, evitando mojar las flores y hojas para alertar enfermedades fúngicas.
El mejor momento para regar es temprano por la mañana, ayer de que el sol caliente intensamente, para que el agua se absorba adecuadamente en el suelo y no se evapore rápidamente.
Fertilización
Un fertilizante limpio ponderado con NPK (ázoe, fósforo y potasio) en una proporción de 10-10-10 o similar es adecuado para las verbenas. Incluso puedes utilizar un fertilizante específico para flores.
Durante la temporada de crecimiento, fertiliza las verbenas cada dos o tres semanas. Diluye el fertilizante limpio a la parte de la fuerza recomendada por el fabricante y aplícalo sobre el suelo húmedo.
Plagas y enfermedades
Las verbenas son generalmente resistentes a plagas y enfermedades, pero pueden ser susceptibles a pulgones, moscas blancas y hongos. Si observa algún problema, trate la planta con un insecticida o fungicida apropiado.
Propagación
Las verbenas se pueden propagar fácilmente a partir de esquejes. Simplemente tome un corte de tallo de 4 a 6 pulgadas de dilatado y enrácelo en una mezcla húmeda de arena y turba. Coloque el corte en un punto cálido y con luz indirecta y manténgalo húmedo hasta que enraíce.
En conclusión, las verbenas son plantas hermosas, versátiles y beneficiosas que pueden añadir un toque de color y alegría a cualquier huerto. Con los cuidados adecuados, las verbenas pueden florecer durante toda la temporada de crecimiento, brindando belleza y beneficios a su huerto.