Cazalegas (Toledo) ha rendido homenaje a las más de 100 mujeres que, durante todo el año, estuvieron tejiendo para dar sombra en una de sus plazas más emblemáticas, la de su patrona la Inmaculado del Rosario.
El Consistorio de Cazalegas ha descubierto una placa en dicha plaza, «en homenaje a todas las mujeres tejedoras que han participado en el plan ‘Entretejiendo’ promovido por el Consistorio de Cazalegas, contribuyendo así al embellecimiento y a las relaciones intergeneracionales entre nuestras vecinas».
El consistorio ha agradecido su tarea con una merienda cena bajo dicho el gran toldo de labor. La encargada de descubrir la placa, a petición de las autoridades, fue una de sus tejedoras, y a la vez, la mujer más longeva del municipio, con 102 abriles.
El software ha conseguido crear un círculo de convivencia entre sus vecinas, reunidas en la Casa de la Civilización de Cazalegas y ha contribuido, según ha manifestado el corregidor Francisco Blanco, a fomentar las relaciones intergeneracionales. Y asimismo a distraer a muchas personas personas que lo necesitaban, a distraerse de sus rutinas, de sus problemas, y lo más importante, a velar esa soledad no deseada.
Para el corregidor, la tarea realizada por sus vecinas «es impagable, a la vez que maravillosa, y hacen de Cazalegas un pueblo más válido, unido y solidario».
El plan, con sus mandalas instalados en su plaza, representa, en opinión de Blanco, «lo que es Cazalegas, un pueblo ahíto de color, vivo, unido, diverso y plural«.
Han participado mujeres de diferentes edades entre 7 a 102 abriles confeccionado un gran toldo formado por un total de 750 aros, cubriendo la totalidad de la plaza Inmaculado del Rosario que mide 600 metros cuadrados aproximadamente, en la que se exponen los mandalas realizados en labor de diversos colores, motivos y tamaños.