«Voy a hacer todo lo posible para que el Partido Popular siga gobernando en la Comunidad Valenciana». El presidente de la Generalitat, Carlos Mazón, ha reunido esta tarde a la Sociedad Directiva Regional del Partido Popular de la Comunidad Valenciana con las bazas de un gobierno minoría o, en última instancia, si resultara inasequible sacar delante la tiempo en solitario con sus cuarenta diputados, de un adelanto electoral encima de la mesa.
La cita ha coincidido en horario con el cónclave que celebrará Vox por orden de Santiago Abascal para tocar la posible ruptura de los pactos de gobierno con los populares por la acogida de menores inmigrantes no acompañados.
Mazón ha dejado claro que no comparte la ruptura y que sería partidario de continuar con el «Gobierno del cambio» en coalición durante el que el paro «ha bajado durante seis meses seguidos por primera vez en mucho tiempo» o el turismo ha frecuentado récords históricos.
El PP y Vox han gobernado en la Comunidad Valenciana en el postrer año y han exhibido, más allá de sus discrepancias ideológicas en materias como la violencia de condición, una pelotón de acto plasmada este mismo jueves en el Parlamento autonómico con la aprobación de la Ley de la Concordia, con la que se ha deroga la norma de Memoria Democrática, y que podría constituir el colofón a su Gobierno.
Cuando está a punto de cumplirse un año de Ejecutante de coalición entre el PP y Vox, las dos formaciones han admitido medidas claves de su software electoral, como la Ley de Autodeterminación Educativa o la deducción de impuestos. Así, hasta un total de cinco leyes nuevas aprobadas o modificadas y un decreto de simplificación administrativa que marca las bases de un nuevo ciclo en la política autonómica.
Sin confiscación, el órdago de Santiago Abascal ha tensionado al mayor la relación entre uno y otro partidos, en presencia de lo que Mazón, quien hasta este miércoles no tenía constancia de una posible ruptura del pacto en la Generalitat Valenciana por parte de Vox, ha convocado a la cúpula de su partido para tocar todos los escenarios.
El más factible es optar por un gobierno en minoría ya que, según explican a torrevieja news today fuentes populares, «no hay otra opción». La formación asegura que la reunión ya estaba prevista, pero se ha convertido en trascendental para el futuro político de la autonomía de anciano peso demográfico y político en la que han gobernado codo con codo el PP y Vox.
La cita se ha regalado a conocer a la misma hora en la que Mazón se sometía a la sesión de control en las Cortes Valencianas. Un pleno en el que ha estado acompañado por el vicepresidente y conseller de Civilización, Vicente Barrera, de Vox, adjunto a su escaño. Uno y otro se han fundido en un achuchón que se ha interpretado como una suerte de despedida, aunque algunas fuentes no descartan un hipotético atmósfera en el que si se Abascal consuma la ruptura Barrera pudiera permanecer en el Gobierno, como independiente o integrado en las filas del PP.
Tanto el «número dos» del Ejecutante regional como la presidenta de las Cortes Valencianas, Llanos Massó, han sido citados esta tarde por Abascal.
Aunque en Valencia los dirigentes de Vox consideran que el pacto de gobierno con el PP ha regalado sus frutos, insisten en conocido en que acatarán la intrepidez que tome desde Madrid la cúpula de su partido. Uno y otro han innovador en que «respetarán a sus votantes» y harán lo que determine Abascal.
Al respecto, Mazón insistió en la «solidaridad» de la Comunidad Valenciana para acoger a menores extranjeros no acompañados y pidió ayuda al Gobierno para «prolongar la dignidad en los centros» que, a día de hoy, están «colapsados». En concreto, albergan a 481 menores cuando la Generalitat dispone de 317 plazas. La petición que ha puesto encima de la mesa el Gobierno pasa porque la Comunidad Valenciana acogiera a otros veintitrés menores.
De acuerdo con las últimas estadísticas oficiales, durante los últimos nueve meses han sido reconocidos unos ochenta menores y el coste de enero a junio de los que han llegado alcanza los 3,7 millones de euros para las arcas de la Generalitat, lo que supone siete millones hasta final del año.
Mientras, Mazón ha trabajador su intervención en el pleno del Parlamento para dar la «enhorabuena» uno por uno a todos los integrantes de su Ejecutante, incluidos los tres de Vox, por los logros el primer año del «Gobierno del cambio».
Veinticinco altos cargos de Vox, pendientes de Abascal
Vox cuenta con veinticinco altos cargos en el Gobierno valenciano entre consellers, secretarios autonómicos, directores generales y subsecretarios, cuyo futuro sindical pende del hilo que maneja Abascal.
La formación dirige la Vicepresidencia Primera con competencias de Civilización, a cuyo frente está Barrera; la cartera de Probidad e Interior con Elisa Núñez; y Agricultura con José Luis Aguirre.
Adicionalmente, en virtud de su pacto con el PP, preside con Llanos Massó las Cortes Valencianas. Sin confiscación, podría prolongar el cargo toda vez que la si la ruptura se limita a los gobiernos autonómicos.
Vox igualmente cuenta con importantes concejalías en los ayuntamientos de Valencia, Castellón de la Plana y Elche, donde entró en los gobiernos municipales que lideran los populares María José Catalá, Begoña Carrasco y Pablo Ruz, respectivamente. En las ciudad de Alicante no gobiernan, pero sus votos sostienen las mayoría del gobierno recinto del PP en el Cabildo.
En las diputaciones provinciales, Vox ni gobierna ni es fundamental en ninguna de ellas. El PP preside y tiene la mayoría absoluta las de Alicante y Castellón. En la de Valencia, los populares gobiernan en coalición con Ens Uneix.
El portavoz de Vox, José María Llanos, se ha sumado a la enumeración de los avances del Gobierno y ha evitado cualquier tipo de confrontación con Mazón, quien le ha agradecido que se «interese por las prioridades de verdad». El presidente de la Generalitat se ha centrado en los datos respecto a la «reducción de las listas de paciencia» en la sanidad valenciana.
En el caso de una ruptura del pacto, el presidente de la Generalitat goza de la potestad que le confiere el Estatuto de Autonomía de disolver las Cortes Valencianas y convocar elecciones autonómicas anticipadas. En su respuesta al portavoz de Compromís, Joan Baldoví, le ha espetado: «Rece para que no lo haga y no apriete el gema del adelanto electoral».
El Partido Popular cuenta con cuarenta de los 99 diputados que forman el Parlamento regional, por lo que en el caso de que Vox (que se sienta en trece escaños) rompiera el pacto, se vería próximo a manejar en minoría o, como postrer arbitrio, optar por un adelanto electoral.
Lo que no entra en ningún cálculo es que Vox respaldara una eventual moción de censura contra Mazón en las Cortes Valencianas.
Diana Morant tercia en la crisis PP-Vox y pide elecciones
El pleno del Parlamento impresionado por la tensión que flotaba en el dominio ha contado con la presencia en la tribuna de invitados de la secretaria genérico del PSPV-PSOE y ministra de Ciencia, Diana Morant, para anunciar la presentación de un arbitrio contra la Ley de la Concordia.
Delante la tensión implícito entre los socios de la Generalitat Valenciana, Morant ha requerido al PP que sea esta formación quien «rompa con Vox por dignidad», aunque ha afirmado que «más que en crisis», los ha conocido «muy enamorados», «totalmente alineados e indistinguibles».
La secretaria genérico del PSPV-PSOE, no obstante, ha trabajador la coyuntura para pedir a Mazón la convocatoria anticipada de elecciones autonómicas en la Comunidad Valenciana en la que la ministra se enfrentaría al dirigente del PP: «Estamos preparados».