La situación que ella y sus compañeros están viviendo es insostenible. El pasado mes de febrero dejaron de ser empleados de una firma anterior para pasar a formar parte de la plantilla de Limpiezas JCórdoba (SCT), la nueva concesionaria del servicio de limpieza de las oficinas de Correos en toda España. Y luego, los problemas comenzaron: “Ni siquiera se sentaron con nosotros y, automáticamente, redujeron el número de trabajadores y las horas de trabajo de los que mantenían”, denuncia Montse.
Pero las quejas han aumentado a medida que ha ido pasando el año. En el caso de Montse, hace falta tres meses sin sueldo ni una de las nóminas. “Vine a trabajar gratis y ahora pido mi salario”, se lamenta. No solo eso. El último ingreso que tuvo, en primavera, llegó el día 15 de ese mes. Y a ello se suma la reducción de su jornada laboral. “Constataron que con 6 horas y media tenía tiempo suficiente para limpiar este edificio de tres plantas y otro a pocos metros. Por ello gano unos 800 euros”, afirma.
No es un caso aislado, los trabajadores de esta empresa están en pie de guerra: “Aunque en Galicia es donde más nos han notado, estamos 700 afectados“.
¿Y qué están consiguiendo con el paro indefinido que inició este mes? Al menos en principio, haga visible su problema. El sindicato CGT ya ha presentado una denuncia ante la Inspección de Trabajo por la situación “insalubre” que se vive en algunos centros, como el de Correos del aeropuerto de Santiago, donde la basura y los desechos se acumulan desde hace semanas.
“Hay compañeros de Correos que empiezan a tener problemas alergias a los ácaros y que no quieren ir a trabajar a sus centros porque son muy sucio“, explica Xoan Xove, representante sindical de estos trabajadores de la limpieza.
Pero, en otros lugares, como en las oficinas donde trabaja Montse en Lugo, es el propio personal de Correos el que se encarga de la limpieza: “Son mis compañeros y entiendo que limpian para poder trabajar en un ambiente limpio, Pero me están haciendo un trabajo porque están haciendo mi trabajo”, lamenta.
El conflicto sigue agudizándose y los trabajadores aseguran que no volverán a sus puestos de trabajo hasta que las condiciones salariales cambianpagar salarios atrasados y mantener horarios anteriores.