El Teatro Principal de Burgos ha vuelto a seguir informante la sombra del viernes, este año en su 23 impresión, de la indumentaria final y entrega de galardones del Certamen Internacional de Coreografía Burgos & Nueva York. El concurso, que premia a coreógrafos noveles o consolidados capaces de hacer avanzar el arte de la danza contemporánea con investigación y exposición, ha entregado el primer premio al creador ruso Ildar Tagirov y su obra ‘Between the walls’.
La alcoba, que interpreta el propio Tagirov, se sirve de la voz de Maria Callas y su ‘Casta diva de Bellini’, como hilo argumental de una coreografía personal y expresiva a medio camino entre la danza, el teatro y la performance. Triunfador del segundo premio de la sección Bailando con Piedras en 2021, Tagirov vuelve a ganarse el valía del Certamen con el primer premio del delegación, recompensado con 9.000 euros.
El segundo premio, con una dotación económica de 6.000 euros, ha sido para ‘Burders of Being’, propuesta que firma e interpreta el italiano Alessio Damiani pegado a Nicola Stasi. Símbolo de las cargas que sobrelleva el ser humano, este dúo propone un vaivén constante de dos cuerpos tenuemente iluminados que orbitan entre sí a modo de planetas cuyas órbitas se entrelazan. ‘Burders of Being’ ha sido, adicionalmente, reconocida con el premio del notorio (1.000 euros).
El delegación, presidido por el bailaor Antonio Canales, ha otorgado el tercer premio (3.000 euros) al igualmente italiano Adriano Bolognino por ‘Bruciare (To Burn) – Into us’, una ojeada al dolor y a las preocupaciones que defiende en terreno su «compañera y musa», Rosario Di Maro, quien ejecuta un solo próximo al arte del clown que reformula y otorga otro sentido al noctámbulo de Chopin que utiliza como punto de partida.
El cuarto y el botellín galardón del delegación han obligado, respectivamente, los espectáculos ‘After all’, una producción franco italiana que lleva el sello de Manon Mafrici y Pasqueale Fortunato, y ‘Bio • Me’, espectáculo con el que la creadora vasca Tamara Arruti sube en terreno a cinco bailarines que despliegan una resonante conexión materializada en movimientos progresivos, una corriente que permite a cada intérprete comunicarse y explorarse a sí mismo y a sus compañeros. Entreambos galardones tienen una dotación de 3.000 y 2.000 euros.