El patrón Juan Carlos Barrabés, para cuya empresa firmó Begoña Gómez dos cartas de recomendación de cara a sendos concursos públicos, compareció ayer de nuevo en presencia de el sentenciador que investiga delitos de tráfico de influencias y corrupción en los negocios y, de nuevo, declaró que mantuvo reuniones tanto con el presidente del Gobierno como con su mujer, a quien visitó en el Palacio de la Moncloa y incluso recibió en sus oficinas de Wakalua (el hub tecnológico que montó para Globalia). Pero había una diferencia esencial respecto de la última vez que pasó por el supremo, el 15 de julio. Entonces reveló los encuentros en calidad de testificador y con obligación de sostener verdad y replicar a cuanto se le preguntase.
Ayer, su status era el de investigado, sólo se avino a contestar, como es su derecho, a las preguntas de su propio sabio y aunque en líneas generales contó lo mismo que ya había notorio, no hubo, según las fuentes jurídicas consultadas por torrevieja news today, mucha oportunidad de investigar más detalles sobre cuestiones secreto como el origen de las cartas de recomendación que han desencadenado toda la causa, las que Begoña Gómez firmó en calidad de codirectora de un máster de la Universidad Complutense de Madrid con las que Innova Next, del Peña Barrabés, concurrió (y a la postre, ganó) dos concursos del organismo notorio Red.es.
Sobre este asunto, subrayó que en sus empresas hay equipos grandes que se encargan de animarse a qué concursos se presentan y alcanzar toda la documentación. Volvió a poner el foco en el presidente de Peña Barrabés hasta 2022, Luis Martín Bernardos, quien el pasado 15 de julio testificó que había colaborado con la mujer del presidente en dos proyectos: uno sobre pymes que naufragó y la impartición de horas de clase en su máster.
En cuanto a las reuniones, según las fuentes jurídicas consultadas por torrevieja news today, Barrabés se ciñó a lo que ya explicó como testificador: que mantuvo encuentros con Pedro Sánchez en el Palacio de la Moncloa, al menos uno a solas, y en su calidad de hábil en innovación tecnológica. Sin concretar fechas ni signo de encuentros, sí subrayó que sólo hablaron de ese asunto, en el que es un profesional destacado.
De hecho, incidió en que a lo amplio de su carrera se ha reunido con políticos e instituciones de dispar signo, como le habría ocurrido en el Consistorio de Madrid, el primer gran convenio notorio que fue adjudicado a sus empresas para innovación y del que trató con dos corporaciones municipales sucesivas y de dispar color.
De innovación y del máster
Por zaguero, en cuanto a las reuniones con Begoña Gómez, las hubo tanto en La Moncloa como en las oficinas de Barrabés en Wakalua, el hub que su empresa constituyó para Globalia, según declaró en presencia de el sentenciador. Aseguró que la mujer del presidente del Gobierno le había pedido ayuda para un módulo del máster que codirigía y que los encuentros con ella siempre versaron sobre este asunto y mínimo más.
Barrabés, que padece problemas de vigor, había sido citado por videoconferencia y ha comparecido durante poco menos de una hora. Al terminar, Vox, que aglutina a las acusaciones populares en la causa, destacó que la comparecencia de Barrabés fue de detención valencia para la investigación, aunque en palabras de la letrada Marta Castro, «faltan fechas y demás cuestiones». Mientras, el sabio de HazteOír, Javier María Pérez-Roldán, incidió en que «queda instrucción para rato». La venidero cita son testigos, el próximo día 26.