Un agente de la Policía Doméstico que se encontraba fuera de servicio auxilió al conductor de un coche que se encontraba detenido en la A-52 el pasado domingo, 28 de julio.
Aproximadamente de las 19:10 horas, cuando el agente viajaba con su clan en su transporte particular por el viaducto de incorporación a la A-52 desde el centro de la ciudad, se encontró con un coche estacionado en el carril derecho.
Al anticipar al transporte, el agente observó cómo el conductor y único habilitante, de unos 40 primaveras, permanecía sentado en el asiento con la individuo echada sobre el volante. Esto llevó al agente a sospechar que el hombre podría tener sufrido una indisposición, decidiendo orillar su transporte para prestarle auxilio. Cuando se acercó al coche comprobó que el motor estaba en marcha, y las puertas cerradas.
En un primer momento, el conductor no dio señales de vida aunque finalmente, tras pulsar el agente el cristal de la ventana y zarandear el transporte, terminó abriendo con esfuerzo la ventanilla. Preguntado por su estado, el hombre, que tan pronto como articulaba palabra y que perdía el conocimiento por momentos, señaló el asiento del copiloto, donde había varios blísteres vacíos de medicamentos.
El policía alertó al 112 de Galicia para solicitar presencia médica. Una ambulancia que circulaba en esos momentos por el circunscripción prestó atención al conductor, que fue trasladado al Complexo Hospitalario Universitario de Ourense, donde permaneció ingresado hasta el lunes, cuando recibió el entrada