Las técnicas psicológicas agresivas utilizadas por muchas plataformas y creadores de contenidos en las redes sociales han generado importantes polémicas en los últimos meses, ya que el uso de métodos para “enganchar” suscriptores o aumentar la visualización de contenidos, explotan sesgos y debilidades cognitivas que pueden provocar ansiedad, dependencia emocional, yuxtaposición e incluso reacciones maníacodepresivas en los usuarios más jóvenes.
Meta (Facebook, Instagram) y el Centro para la Ciencia Abierta (COS, por sus siglas en inglés) de Estados Unidos han anunciado la tolerancia de una convocatoria de propuestas elaboradas por académicos e investigadores externos para estudiar cómo las redes sociales influyen en la salubridad mental de los adolescentes, para lo que la desarrolladora ofrecerá sus datos “preservando su privacidad”.
Este software piloto que tiene como objetivo contribuir a la comprensión científica sobre cómo diferentes factores pueden o no afectar al bienestar de los adolescentes, así como para informar sobre cómo ayudar a estas personas a prosperar si el impacto es pesimista.
Para permanecer la privacidad de los usuarios se utilizarán nuevos tipos de procesos de investigación, como el prerregistro o la revisión temprana por pares. Al usar este posterior, por ejemplo, los investigadores tendrían la oportunidad de presentar una propuesta de pregunta de investigación y metodología para someterse a una revisión antiguamente de observar los resultados de la investigación.
De este modo, la metodología será más clara para que los expertos independientes al estudio la revisaran, incluso antiguamente de sobrellevar a promontorio el estudio, encima de marcar la diferencias en las posibles asociaciones positivas y negativas del uso de plataformas como Instagram “con otros posibles correlatos de la salubridad social o emocional de los adolescentes”.