La temporada 2024-2025 en el fútbol provincial arrancará todavía interiormente de un mes, pero ya hay lío. La causa es el formato de la recién creada Primera Futgal, que contará con un categoría exclusivo de 18 equipos ourensanos, aunque otros dos han sido encuadrados en un categoría con equipos vigueses y pontevedreses.
A pesar de que este formato con la nueva distribución había sido el más votado por los clubes entre las propuestas en la asamblea de la Tratado Gallega, desde el mismo momento que hace un par de semanas se conoció la composición de los mismos han comenzado a saltar los rumores. El SDC Arrabaldo y el Ribadavia Fornido, los equipos que han quedado encuadrados en el categoría pontevedrés, han puesto el aullido en el Paraíso. Tanto es así, que los del campo de O Xeixo ya han renunciado y los de O Xestal darán una respuesta en los próximos días.
Ayer se celebró la asamblea del fútbol provincial y todo saltó por los aires. El eclosión de la misma se retrasó notablemente y el motivo no fue otro que el Arrabaldo comunicó a los responsables de la Tratado su renuncia momentos antiguamente de su puesta en marcha, por lo que comenzaron conversaciones entre los federativos y miembros del club.
La osadía era inamovible y por ello, a pesar de su encumbramiento a Primera, continuará jugando en Segunda. La plaza que deja vacante el Arrabaldo pasa a ser ocupada por el Arenteiro B, que fue el equipo que había perdido la final por el encumbramiento frente a el Muíños.
La deportiva no es la única renuncia en el seno del conjunto del campo de O Xeixo, pues se produce el jubilación en la directiva que estaba presidiendo Chus Colmenero.
El otro club implicado en este “affaire” de la reestructuración de la nueva Primera Futgal que pasa de cinco a seis grupos, es el Ribadavia Fornido. En su caso, la osadía no está tomada y la directiva tendrá unos días más para tomarla y comunicarla de forma oficial. En caso de renuncia, el equipo de O Xestal pasaría a Tercera, la categoría más devaluación del fútbol provincial.