Las celdas de las monjas de un convento vasco se reconvierten en pisos de alquiler para jóvenes


El ala este del antiguo convento y residencia del noviciado de las Esclavas de Azpeitia, en desuso desde hace varios abriles, se ha transformado tras las pertinentes obras y 6 millones de euros de inversión pública en 48 pequeños apartamentos que se ofrecen a jóvenes de hasta 36 abriles en régimen de inquilinato temporal. El campo de acción de vivienda ya ha hecho entrega de algunos juegos de llaves a los primeros adjudicatarios, que pagarán un precio corto y concorde a sus posibilidades económicas.

El consistorio de Azpeitia adquirió el edificio en 2013 para más tarde conciliar con el ejecutor vasco la creación de estos alojamientos. El consistorio cedió finalmente el confuso en 2020: “Es especialmente importante —expresa la alcaldesa, Nagore Alkorta—, ya que, en superficie de construir desde cero, hemos utilizado un edificio ya existente y conocido para los azpeitiarras”. Tras dos abriles de obras se han creado 48 pisos de hasta 60 metros cuadrados, 31 de un dormitorio y 17 de dos. Dos de ellos acondicionados para personas con movilidad estrecha permanente.

Uno de los adjudicatarios, que recibió las llaves el pasado 23 de julio, es Conrado Mott, un novato de 36 abriles que está muy “agradecido por la oportunidad”. Cuenta que supone un capital importante porque en Zumaia, donde hasta ahora residía de inquilinato, “pagaba 750 euros” entre todos los gastos. “Ahora 300”, dice. Pese a que la cuota para los pisos de dos habitaciones, como el suyo, pueda surgir hasta los 420 euros, en ningún caso el inquilinato supondrá más del 30% de los ingresos del inquilino en cuestión.

“Todavía no me he instalado porque no he terminado la mudanza”, cuenta Mott. Su idea es entrar a comportarse la semana del 12 de agosto, una vez haya terminado de acomodar sus pertenencias “y traer la cama”. Desde ese momento, puede permanecer en ese adoquinado hasta 5 abriles.

Para aceptar la misma carta que recibió Conrado en la que se le anunció la adjudicación los interesados deben cumplir una serie de requisitos, a entender, no tener una vivienda en propiedad, una de las personas titulares solicitantes de vivienda en inquilinato debe estar empadronada en Azpeitia y contar con ingresos ponderados anuales de 3000 a 42315 euros y no tener una vivienda en propiedad.

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