Al punto que una semana a posteriori de que Galicia recibiese a un primer y segundo comunidad de personas refugiadas de Mali –100 y 170, respectivamente– llega la confirmación de que, «en los próximos días», arribarán los primeros catorce menores migrantes no acompañados (menas) procedentes de Canarias, todos ellos con edades por debajo de los 13 abriles, de los veintiocho que la Comunidad acordó acoger en la Conferencia Sectorial de 2023.
La información la ha confirmado este miércoles la Consellería de Política Social y, según recoge Europa Press, en Galicia ya está todo a punto para aceptar a estos niños, que serán distribuidos entre los distintos centros de los que dispone la red pública de la Xunta. Los catorce que llegarán en una época aún por confirmar, pero que será inminente, suponen la parte del total de veintiocho que le corresponden a la comunidad gallega en virtud del acuerdo al que se comprometió el pasado año. Todavía no se han ofrecido más detalles sobre posibles gestiones para la recibimiento de los otros veintiséis que Galicia aceptó acoger en la Conferencia Sectorial de este año, que previsiblemente tendrán que esperar, como intrascendente, a que se resuelva el proceso derivado del año aludido.
Hospitalidad e integración
En narración al caso particular que presenta el maniquí gallego, que no dispone de instalaciones específicas para la acogida de menas, sino que asigna a los menores a un centro u otro de los 70 de pequeño tamaño que hay repartidos por todo el demarcación, Política Social ha puesto en valencia su utilidad y su intención de distribuir a los jóvenes «para simplificar su integración con otros menores y, a derrochador plazo, en la sociedad gallega».
Precisamente, el área del ramo ha reivindicado el papel de Galicia como puerto de presentación y posterior estancia –«extensión de acogida y tierra solidaria»–, había dicho hace unos días la titular de Política Social, Fabiola García— y ha cargado duramente contra «las falsedades vertidas por el Gobierno de España», que «acusó a la Xunta de ser insolidaria». Pero los hechos, defienden desde el Gobierno gallego, «muestran que Galicia es una comunidad ejemplar en la puesta a disposición del resto de comunidades de todos sus posibles para aliviar la emergencia migratoria».
No es lo único en lo que ha puesto el acento este miércoles la Xunta. De forma paralela, ha vuelto a protestar al Estado que reformule la financiación que se concede a este software, puesto que solo se hace cargo del primer año de estancia de los menores en la Comunidad, para que cubra sus micción hasta que abandonan el sistema de protección –lo cual no siempre coincide con el importancia de su mayoría de años– y a demandarle garantías para que todas las comunidades autónomas participen de forma activa en la configuración del reparto final.
En relación a este tablado en concreto, Política Social ha enfatizado que, a causa de la corta años de los próximos menores que llegarán a Galicia, su estancia en los centros gallegos deberá prolongarse durante varios abriles, por lo que será de crucial importancia afirmar que Galicia dispone de los posibles necesarios durante ese tiempo.