El pasado lunes, tres días posteriormente de que Iván Castaño perdiese la vida en una seducción de la fiestas de la parroquia viguesa de Matamá que no tenía autorización para tratar, el Concejo de Vigo intentó sacudirse cualquier tipo de responsabilidad por el suerte. Este miércoles, el PP lugar ha debido al Concello más explicaciones tras un comunicado que dejaba más interrogantes que respuestas. Y la comisión de fiestas de Matamá asimismo replicó al Concello: no es ella quien tiene competencias para cerrar las atracciones que no están autorizadas.
El suerte ocurrió la amanecer del viernes al sábado en las fiestas de la parroquia viguesa de Matamá. Uno de los brazos del conocido como ‘saltamones’ se desprendió y murió uno de las personas que iban en un habitáculo, Iván Castaño, de 35 primaveras, originario del concello orensano de O Estúpido, pero desde hace primaveras residente en la ciudad olívica. Los servicios médicos no pudieron salvarle la vida.
Sin autorización
El Concejo publicó el lunes un comunicado en el que explicaba que los responsables de la seducción no tenían toda la documentación en regla y, por lo tanto, no se le había hexaedro autorización para poner el marcha el ‘saltamontes’. El Concello había requerido varias veces a los dueños de la seducción los papeles que faltaban. El Concejo añadía que tanto la comisión de fiestas como los titulares de la seducción fueron notificados de esa desautorización por no presentarse todos los papeles en regla.
Tras ese escueto comunicado del lunes, al día sucesivo el Concejo apuntó algún detalle más. Añadía que, tras la mencionada notificación, la Policía Específico «se trasladó al puesto en la tarde del viernes y no detectó actividad» en la seducción en la que horas más tarde murió Iván Castaño.
Este miércoles, la comisión de fiestas ha respondido al Consistorio. Su presidente, Cristian González, ha insistido en que toda la documentación que dependía de ellos, de la propia comisión de fiestas, estaba en orden. A finales de junio, solicitaron al Concello los permisos pertinentes, el de la ocupación temporal de espacio sabido y una exposición responsable, y les fueron concedidos.
Son los propietarios de cada seducción quienes tienen que diligenciar luego sus propios permisos para tratar. Los titulares tiene que aportar el tesina técnico de la seducción, el manual de funcionamiento y el obra de operaciones. Pero, a finales de julio, el Concejo alertó a la comisión de que los propietarios del ‘saltamontes’ no habían enviado toda la documentación. Y tanto el Consistorio como la propia comisión avisaron a los responsables de la seducción de esa error de permiso. En eso coinciden tanto la interpretación del Concello vigés como de la comisión de fiestas.
«El jueves día 1 –de agosto– llega a las 22 horas otro aviso de que la documentación está incompleta, volvemos a decírselo al ‘saltamontes’, que nos dice que se lo transmitirá a su gestoría para que envíe el documento», ha dicho el presidente de la comisión de fiestas, según ha recogido Ep. «A partir de ahí, nosotros no tenemos más notificaciones. Nuestra preocupación es tener el permiso de la fiesta y lo conseguimos para poder hacerla«, ha añadido González, que lanzó de forma indirecta un mensaje al Concello: «Cerrar atracciones no es competencia nuestra«.
Siquiera el PP municipal ha quedado conforme con las explicaciones del Consistorio. Este miércoles, los populares han preguntado al gobierno lugar si habían hexaedro orden «expresa» a la Policía Específico para guardar las atracciones de las fiestas de Matamá que no estaban autorizadas. Además exigen detalles sobre esa encuentro de los agentes horas ayer de que se produjera el suerte.
A posteriori del comunicado del Concejo en el que aseguraba que la Policía Específico se había trasladado al puesto y que no había detectado actividad alguna, el PP municipal quiere que el Consistorio aclare «a qué hora se produjo la encuentro» Y, sobre todo, si los agentes fueron «con una orden expresa de supervisión y control de las atracciones no autorizadas». Porque eso, añaden los populares, «obligaría a la Policía a hacer labores de vigilancia constante y específica». El PP de Vigo cree que el gobierno municipal intenta esconderse en comunicados de prensa «ambiguos», «lavarse las manos» y «repartir culpas entre los demás».