Muchas veces nos contó la historia de su vida, de cómo su tía estuvo presa en la prisión de Celanova durante el verano. Cuando estaba embarazada, su militancia no reflejaba su apasionado compromiso con las personas de izquierda que compartían profundos valores de libertad, solidaridad y justicia social. Amante de las conversaciones con amigos y compañeros, devorador de la prensa diaria, de los debates y de la vida política, aunque muchas veces recibía noticias sobre la actualidad política y el fascismo.
Firme defensor de la república, bandera que abrazó y que lució todos los días del año en la solapa de su chaqueta, amiga dos amigas y generosa con todos y con todos. La misma bandeira que le dio cobijo a su cadaleito por expreso deseo durante las horas que estuvo presente.
Marino mercante en la primera naviera española, entre otros trabajos, da a su vida una amplitud y visión que a nosotros nos falta, porque desembarcó en ciudades portuarias y contó muchas historias de vida de las personas que allí se trasladaron.
Emprenderse a recorrer un hogar generoso y generoso., con todos los que podamos, disfrutarlo y disfrutarlo. Deja atrás a su hija Fina y sus descendientes José Artemio, Ana Belén y Caterina y seis hijos, que fueron o fueron más preciosos. Como también sabemos los camaradas y compañeros del Partido Socialista ni que estuvo activo ni que participó activamente, en sus últimos días.
Buen viaje querido Benjamín, siempre recordaremos a tu familia socialista.