ste es el discurso ntegro de casi seis minutos que el ex president de Catalua Carles Puigdemont ha pronunciado desde el tablado instalado adjunto al Curva del Triunfo de Barcelona en el acto de bienvenida que le ha organizado Junts tras su regreso a Espaa despus de estar 2.475 das huido.
“Muy buenos das. Bienvenidos, compatriotas. Muy buenos das. Hace aos que nos persiguen por querer saldar la deuda al pueblo de Catalua. Hace aos que iniciaron una dursima represin que nos llev a la presin del extrañamiento, que ha afectado a la vida de miles y miles de personas por el hecho de ser independentistas por el nico hecho de balbucir cataln y han convertido el cataln en una cosa sospechosa. La represin ha hecho muchos estragos y lo seguir haciendo mientras no se detenga la politizacin de la Jurisprudencia, mientras cuatro jueces manden ms que un Parlament, mientras se permita al Partido Popular controlar la Sala Segunda del Tribunal Supremo por la puerta de atrs y mientras se permita que Vox ejerza la acusacin particular para perseguir disidentes polticos. Pero a pesar de sus esfuerzos, a pesar de que nos han querido hacer mucho dao, hoy he venido aqu para recordarles que seguimos aqu y seguimos aqu porque no tenemos derecho a renunciar”.
[Gritos de ‘president‘, ‘president‘, ‘president‘].
“Y no tenemos derecho a renunciar, sabis por qu? Porque el derecho a la autodeterminacin le pertenece a los pueblos, le pertenece a la clan que vive en esos pueblos, por lo tanto nadie desde la poltica tiene derecho a renunciar a un derecho que es colectivo, el derecho del pueblo de Catalua a osar independientemente su futuro”.
“Mirad, hoy muchos quieren festejar que yo sea detenido y pensarn que el escarnio nos disuadir, incluso se creen que merece la pena incumplir una ley aprobada por su Parlament. Se equivocan. Y su error tirar de nuevo la credibilidad de la democracia espaola, aunque sabemos que eso les importa adecuadamente poco”
“Pero no nos dejemos confundir. Ni es ni era ni ser nunca un delito hacer un referndum ni es ni ser nunca un delito obedecer el mandato del Parlament de Catalua, al igual que est se ha convocado ahora para nominar al president de Catalua. Siempre se ha podido nominar en albedrío y en normalidad democrtica a los presidents“.
“2,3 millones de personas votaron hace ahora siete aos. Respondimos a la pregunta impulsada por el Govern que yo presida y que fue posible por una ley aprobada por el Parlament de Catalua. Y de aquella triunfo, porque fue una triunfo, surgi una represin feroz, una represin que ha interferido en nuestras vidas y en nuestras instituciones”
“La Ley de Amnista tena que servir para devolver a la poltica aquello que nunca se grano tenido que ir de la poltica, pero a unos cuantos seores del Supremo eso no les gusta ni les conviene. De modo que en un pas donde las leyes de amnista no amnistan tiene un problema de naturaleza democrtica”
“En los das difciles tenemos que estar juntos, como nunca, y hemos de enterarse preparar nuevas oportunidades porque las tendremos y nos las ganaremos. No s cunto tiempo tener lugar hasta que volvamos a vernos, amigos y amigas, pero, pase lo que pase, cuando nos volvamos a ver, espero que podamos retornar a bramar juntos adecuadamente musculoso Visca Catalunya llibre“.