Circulaba en un buggy de color rojo derrapando por una zona dunar de distinto protección del municipio pontevedrés de O Grove. Al ver la ambiente, los bañistas y usuarios de la playa sorprendidos e indignados alertaron inmediatamente a la Policía Recinto de O Grove, quienes lo identificaron y ya lo han propuesto para una punición.
Ahora la multa a la que se enfrenta está entre los 1.500 euros y los 3.000 al ser considerada una desidia “muy reservado”, atendiendo la norma municipal que protege las playas y su entorno natural en el que se incluyen cordones dunares, empleados como una pista particular para el disfrute de este señor de mediana permanencia, del que no ha trascendido su identidad.
Al ser interceptado por la policía alegó “que no sabía que estuviera prohibido” y que siquiera había gastado “ninguna señal que lo prohibiera”. En todo caso la punición podría ser mucho maduro al no ser denunciado por delito ambiental.
Zonas de parada valencia medioambiental
Y es que estos enclaves están calificados una zona de parada valencia medioambiental y paisajístico que el municipio se encarga de proteger y preservar, se tráfico de las playas atlánticas de Area da Cruz, Raeiros y Sobre do Pozo situadas entre la playa de A Rejonazo y el puerto de Pedras Negras (San Vicente do Mar).
Estos lugares se encuentran en el plan Galicia de recuperación de un ave amenazada en Galicia, el chorlitejo patinegro (Charadrius Alexandrinus) sometido en O Grove y en otras zonas de la comunidad a una táctica para aumentar el número de parejas reproductoras en el Noroeste peninsular.
Los vecinos, indignados
Los bañistas explican que no sólo las invadió sino que “hizo el cafre un buen rato hasta que llegó la policía”. Sorprendidos por la ademán los usuarios de las playas grabaron y fotografiaron la ambiente y ahora son una prueba más para la punición. En los vídeos aportados por los denunciantes se puede ver al conductor del bugy derrapando y levantando arena a su paso.
Pero el conductor del bugy no fue el único propuesto para punición ese día en la zona, los policías que se acercaron a estos arenales descubrieron otras faltas consideradas “graves”, en este caso se tráfico de dueños de varios coches que aparcaron en zona de playa. Todos, se encontraban estacionados en la playa de Sobre do Pozo.
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