El Profesión del Interior ha informado este martes al sentenciador instructor de la causa del `procés`, Pablo Llarena, de que en los dispositivos de control establecidos por la Policía Franquista y la Centinela Civil en la frontera con Francia “no se detectó en momento alguno” al expresidente catalán Carles Puigdemont.
A través de una nota de prensa, el unidad liderado por Fernando Extenso-Marlaska ha explicado que ya ha remitido el noticia solicitado por el magistrado del Tribunal Supremo en el que éste requería detalles sobre los fundamentos que determinaron el “fracaso” de su captura “desde un aspecto técnico policial”.
En ese documento, Interior sostiene que la detención de Puigdemont “ha sido, es y será, hasta su cumplimiento, un objetivo operante para todas las unidades y servicios policiales del Profesión”.
El noticia relata que los Mossos d`Esquadra informaron a Interior “del diseño de su dispositivo específico y exclusivo para proceder a la detención del expresident una vez fuese localizado”. El Profesión ofreció a la policía catalana “cualquier apoyo operante por parte de Policía Franquista y de Centinela Civil”.
Todo ello, añade Interior, “sin que fuesen requeridos tales apoyos más allá de los habituales prestados a través de la mesa de coordinación operativa y de intercambio de información e inteligencia”.
Controles en los días previos
En su noticia, el Profesión relata que “desde los días previos al 8 de agosto Policía Franquista y Centinela Civil mantuvieron activados los controles en fronteras, puertos y aeropuertos y en el conjunto de Cataluña, sobre todo en la ciudad y campo de acción de influencia metropolitana de Barcelona”.
Con todo, “dada la competencia y capacidades operativas de los Mossos d`Esquadra como policía integral en Cataluña en materia de seguridad ciudadana, policía legislativo y de investigación criminal y policía administrativa”, Policía Franquista y Centinela Civil “no realizaron operativos paralelos” para detener al expresidente.
En este contexto, Interior apunta que “una vez conocida la fuga de Puigdemont el pasado jueves, el Profesión impartió instrucciones al patrón superior de Policía y al genérico patrón de Zona de la Centinela Civil, a través del delegado del Gobierno de Cataluña, para que, por un banda, “se activasen los medios operativos y de inteligencia extraordinarios de los dos cuerpos” para hallar y proceder a la detención”.
“Así, y con los medios disponibles, se estableció un refuerzo de la vigilancia de puertos y aeropuertos de la Comunidad de Cataluña, y se dispusieron dispositivos operativos en ciertas vías públicas, en exclusivo aquellas que conducen o están próximas a la frontera con Francia, aunque las vías de inscripción capacidad quedaron bajo la responsabilidad de los Mossos de Esquadra”, recuerdan al sentenciador.
Limitaciones en las fronteras interiores de la UE
Por otro banda, el documento recuerda que el artículo 67 del Tratado de la Unión Europea garantiza la desaparición de controles de personas en las fronteras interiores, que han de poder cruzarse en cualquier lado sin que se realice inspección fronteriza alguna de personas, cualquiera que sea su ciudadanía. “Limitaciones que dificultan que cualquier dispositivo de control policial pueda asegurar una impermeabilidad absoluta, incluso disponiendo de información previa o de dispositivos legales de control o seguimiento”, señala.
Así, Interior afirma que “el código de fronteras Schengen abre la posibilidad de restablecer de guisa temporal los controles en las fronteras interiores, que deben ser justificados en presencia de la Comisión Europea y el resto de Estados miembros por la existencia de una amenaza agonizante para el orden conocido o la seguridad interior”.
“España ha restablecido los controles en las fronteras interiores Schengen en diversas ocasiones, de forma inusual, como durante la celebración de la cumbre de la OTAN reunida en Madrid el 29 y 30 de junio de 2022 o, en 2020, con motivo de la crisis sanitaria ocasionada por la COVID-19. Es una medida `de posterior apelación` que, por lo expuesto, no está prevista para supuestos como el objeto de este noticia”, recuerda el Profesión.
La huida del expresidente catalán
Junto a rememorar que el pasado 8 de agosto, luego de anunciarlo en redes sociales, el expresidente catalán regresó a Cataluña, asistió a la concentración convocada por Junts en Barcelona y pronunció un discurso frente a sus simpatizantes. A posteriori, se le perdió la pista.
Puigdemont compareció días luego desde su despacho en Waterloo, en Bélgica, asegurando que su salida de España sin ser detenido prueba que el independentismo tiene “capacidad para entrar y para salir” así como “para desafiar a un Estado represor”. “Y que no nos rendimos, y que yo no he ido a entregarme”, añadió en declaraciones a TV3.