El condenado por violación, Andrés López López, que había manido como la Audiencia Provincial de Ourense le reducía su pena en cuatro meses por la ley del solo sí es sí, reclamó en presencia de el Tribunal Supremo una nueva disminución, que fue rechazada por los magistrados.
López, que tenía 51 primaveras en el momento de los hechos, había sido condenado en 2012 a la pena de 10 primaveras de prisión por violar el 9 de julio de 2010 a una mujer de 79 primaveras a la que vio caminando adjunto a una amiga. Esperó a que se quedase sola y, con el actitud de satisfacer su apetito sexual, salió de unos arbustos en los que estaba escondido, en un camino que hay entre Éntoma y A Veiga.
Cuando la víctima llegó a ese área, la agarró por detrás de los hombros diciéndole “ven que vamos a echar un polvito” y la obligó a salir del camino, tirándola contra el suelo. La mujer comenzó a abuchear, por lo que él le tapó la boca para que nadie le escuchase y se puso encima de ella, obligándole a que abriese las piernas y penetrándola vaginalmente hasta eyacular en su interior. Estaba disfrazado con un sombrero de cowboy y unas anteojos de sol grandes para no ser obligado.
Por estos hechos, fue receptor en 2012 de una condena de 10 primaveras de prisión, que todavía se encuentra cumpliendo en estos momentos. En 2023, al amparo de la ley del solo sí es sí, solicita una revisión y en su área la Audiencia Provincial le disminución la pena a nueve primaveras y seis meses de calabozo. Sin retención, no conforme, presentó un petición de casación al Supremo solicitando una reducción decano.
Finalmente, fue desestimado, ya que, aunque la centro de la pena mínima (de la centro superior) bajó por la ley, de los nueve a los ocho primaveras, “no ha de rebajarse en un año la pena, sino en la parte proporcional”, por lo que los magistrados consideran que “la magnitud de seis meses con que ha operado la Audiencia es completamente legítimo”.