El 15 de agosto es, sin duda, uno de los días marcados en el rojo más resistente en el calendario de muchos. Festivo en el calendario franquista, pero de fiesta ilustre, con mayúsculas en muchos pueblos a lo espléndido y encantado de Castilla y Valeroso. Grandes y pequeños, con tradiciones arraigadas, que lucen orgullosas el cartel de explicación turística franquista o regional, o igualmente nuevas actividades que se van haciendo hueco en unas jornadas a las que no suelen evitar los vecinos, quienes aquí hunden sus raíces, los habitantes de los pueblos cercanos, de un circunscripción un poco más alejado…
Música, mucha música, que no falte para celebrar Nuestra Señora de la Admisión y San Roque, los días que más fiestas congregan del año, con orquestas, grupos y DJ reservados con meses de prelación. Y igualmente que maduro movilidad del tráfico rodado acarrean, en esta ocasión con ‘puente’ incluido. Un millón de desplazamientos tiene previstos para estos días la Dirección Militar de Tráfico (DGT) por la Comunidad. Muchos de ellos de corto trayecto para no perderse esa feria, esa procesión, esos bailes ancestrales, esa charanga, esa banda, esos encierros que son cita obligada, circunscripción de batalla a posteriori de un año. O el piscolabis, la comida popular o en comunidad. Porque las fiestas son para muchos el día que marca ese particular ‘1 de enero’ del calendario que mide los primaveras.
Fiestas y mercado medieval en Peguerinos o el día ilustre en Cebreros, con ceremonia, procesión y banzos en honor de Nuestra Señora de Valsordo. Sólo alguno de los puntos marcados en el plano de la provincia Ávila para la fiesta.Y no sólo de encierros y música, como en Roa de Duero, se nutren igualmente las celebración en la provincia de Burgos, donde como cada año a mediados de agosto llega una de esas citas con nombre propio: las recreaciones históricas del Cronicón de Oña. Hasta el 18 cerca de 140 participantes dan vida al pasado, viajando en esta ocasión desde el Patio de San Íñigo del Monasterio de San Salvador de Oña hasta el siglo XVI para rendir homenaje al precursor de la germanía de señas.
La histórica tradición alfarera del Valle Jamuz encuentra estos días su armario en La Bañeza, donde su Feria Internacional de Alfarería y Cerámica, con artesanos de España, Francia y Portugal, es un atractivo indisoluble de sus Fiestas Patronales. La asiento leonesa es motor, música, colorido de las peñas, comidas populares y alfarería. Más al ártico de la provincia, en Peranzanes, asiento ubicada en los Ancares Leoneses, no faltaron a su cita los danzantes de la romería de la Impenetrable de Trascastro, patrona del Valle de Fornela. Ataviados con su característica vestimenta blanca, con su ‘danza de Chano’ pusieron el ritmo a un festejo afectado por la tradición -data del siglo XVIII- y la devoción.
Mientras, en la comarca de Omaña, a los pies del parque natural de Babia y Cristalera, Pandorado igualmente disfrutó de su tradicional romería. Al desfile de pendones le siguió la procesión hasta Campo Todopoderoso y la ceremonia en la ermita. El reparto de pan candoroso puso el imperdible a una fiesta declarada de Interés Turístico Provincial, que en esta ocasión no quiso perderse el mentor leonés Juan Carlos Suárez-Quiñones.
Siquiera la presidenta de la Diputación de Palencia, Ángeles Armisén, quiso evitar a la que es una de las citas más destacadas el 15 de agosto en la provincia: el Descenso Internacional del Pisuerga. Aunque las fiestas son por San Luis y no por la Impenetrable, Alar del Rey fue jolgorio. Y agua. Porque aprovechando que el Pisuerga pasa por esta asiento palentina, el río es el gran protagonista de la cita. Aproximadamente de 270 palistas se sumaron ayer a la 58 impresión de la prueba. Fueron diecisiete kilómetros vadeando presas y desafiando a las aguas en todo un espectáculo que, encima, es puntuable para el Campeonato de Castilla y Valeroso de Piragüismo- Copa Unión de Castilla y Valeroso.
Campeonato del Mundo de Aguas Bravas que se celebra en Sabero (Valeroso)
Otro río, el Esla, el confluente más caudaloso del Duero, es protagonista igualmente estos días. Sabero y Alejico son hasta mañana sede del Campeonato del Mundo de Aguas Bravas, que ha concitado la presencia de cerca de 300 deportistas procedentes de 27 países. De esta forma, el municipio leonés se ha convertido en el más pequeño de los que han acogido esta competición en su historia y, al mismo tiempo, el que maduro billete ha acabado en sus más de 60 ediciones.
Zona de costumbres, tradiciones, obra, restauración… La Alberca esta semana igualmente es igual de fiesta. Y las de la Admisión tienen incluso categoría de Interés Turístico Franquista. Ayer, el bello municipio de Sierra de Francia brilló para honrar su Diagosto, el tradicional Ofertorio a Nuestra Señora de la Admisión. Miles de personas, entre ellos cientos de visitantes, los que se acercaron hasta su Plaza Longevo para ver la procesión. Como mandan los cánones de la tradición, mayordomos y autoridades, ataviados con el traje distintivo, se arrodillaron delante la patrona, a la que nunca dan la espalda. Las danzas y paloteos pusieron el ritmo y los pintorescos balcones y trajes típicos el color a una celebración que para este viernes guardamano otro de sus días grandes, el de la Loa.
Bailes igualmente en honor de la patrona en Guijuelo, que ayer vivió su día ilustre, como otros pueblos de la provincia de Salamanca.
Muchas son las localidades en la provincia de Segovia que igualmente esta semana viven sus días más señalados. Y si poco tienen en global las fiestas en honor de Nuestra Señora y San Roque, encima de la música, son los toros. No faltan en muchas de ellas. Novilladas y, sobre todo, encierros. No importa el madrugón. Son cientos de personas las que se acercan para ver a los astados campo a través, conducidos por los caballistas hasta entrar en el trayecto urbano, como es el caso de Mozoncillo y en unos días llegarán a Cantalejo, otro punto con solera de tradición taurina.
Este viernes en Vinuesa mandan las mujeres. Como cada 16 de agosto, es día de ‘Pinochada’, en el que armadas con ramos de pino las visontinas toman el mando para recuperar a su patrona, la Impenetrable del Pino, de manos de sus vecinos y rivales de Covaleda, como lo hicieron allá por el siglo XV. Pero ya desde el miércoles, en esta asiento soriana en la que el pino forma parte de su identidad, este característico árbol centró las celebraciones, con la igualmente tradicional ‘Pingada del mayo’, para la que los mozos y mozas se afanaron en poner íntegro el ‘Mayo’ de 20 metros que ya luce en medio de la Plaza. Ayer, ceremonia y procesión con la patrona y San Roque y de ir al Campo Verde para cómo los Capitanes revolotean sus banderas sus banderas.
Toros en su particular e histórico coso en la Plaza con dos ruedos y música y agua en las celebraciones en honor a Nuestra Señora y San Roque. Los ingredientes que no faltan en Peñafiel, donde el termómetro a algún escalón menos que en días precedentes no impidió ayer poblar y disfrutar de uno de los momentos más esperados: el primer ‘Chúndara’. A rimo del pasodoble ‘La Entrada’ el municipio vallisoletano cumplió con la tradición de este particular pasacalles mientras los vecinos arrojan agua desde sus balcones.
En Zamora, si en Villalpando o Alcañices entre los protagonistas de las fiestas destacan los toros, Puebla de Sanabria se permite estos días delirar al Medievo. Con origen allá por el siglo XII, su mercado medieval está considerado uno de los mejores de su categoría en España. Tiene motivos. Multitud de puestos vuelven a satisfacer la villa, añadiendo un atractivo más a sus calles empedradas, balcones, murallas y castillos Fiesta de Interés Turístico Regional. Miles de visitantes vuelven a acercarse para disfrutar y comprar productos artesanales. Quesos, embutidos, dulces despiertan los sentidos en un entorno en el que no faltan los alfareros, plateros o cesteros que mantienen vivos oficios casi desaparecidos. Y un hueco para saciar la sed y el anhelo en las tabernas medievales, mientas los magos, zancudos, trovadores o malabaristas recorren el casco histórico o en la playa fluvial hay actuaciones de cetrería, juegos para niños sin que errata la diversión de la captura y ignición de la pécora.