Hay parejas que deciden romper su relación, pero que no pueden separar sus caminos. Es lo que está pasando con el aumento del precio de la vivienda. A día de hoy, en España, los jóvenes tendrían que racionar de media casi 4 abriles y medio la totalidad de su sueldo para poder satisfacer la entrada de un asfalto.
El Gobierno ofrece ayudas para afrontar el plazo con los avales ICO con el objetivo de proporcionar un préstamo hipotecario que pueda cubrir hasta el 100% del coste. Sin retención, un referencia del Consejo Común de los Colegios Oficiales de Agentes de la Propiedad Inmobiliaria de España advierte de que el 60% no va a poder aceptar a ellos.
Esto es lo que lleva a muchas exparejas a tener que continuar compartiendo vivienda, a pesar de que la relación se haya regalado por finalizada. Por ejemplo, en el caso de Emilio, él rompió con su pareja, pero continuó viviendo con ella, lo que califica como “un dominio tóxico muy poco recomendable“. Esta situación se prolongó durante rodeando de 9 meses porque, a pesar de no querer hacerlo, era la opción más económica para uno y otro. Sin retención, al final pudieron separar sus vidas completamente.
En el caso de John, a día de hoy continúa viviendo con la que fue su mujer. A pesar de que ha intentado independizarse de su ex, dice que la cosa está difícil, y que es casi inverosímil. “El sueldo peculiar de gachupin mileurista, hoy por hoy no puede conducirse con ese tipo de sueldo en un asfalto de inquilinato”, ha explicado John. Sin retención, dice que uno y otro se conocen y tratan de echarse un cable.
El independizarse se aplaza
El aumento del precio de la vivienda es poco que preocupa a todos los ciudadanos españoles, sobre todo a aquellos que comparten asfalto o que continúan viviendo en casa de algún abierto. Este problema varía en función de la zona geográfica en la que se vive, de modo que Madrid, Barcelona o Palma de Mallorca son algunas de las ciudades más caras del país.
Un referencia llevado a agarradera por Fotocasa y que refleja la situación del mercado de la vivienda en los tres primeros meses de 2024 expone que cada vez hay más jóvenes que quieren ser propietarios de una vivienda, poco que se ve truncado con el suspensión coste de adquirirla. Más ganas de comprar que de arrendar es lo que se costal en conclusión de la situación del mercado.
Sin retención, es una intrepidez que no deja de aplazarse por la dificultad de hucha, la errata de estabilidad económica y gremial y la situación financiera del país.
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