La asociacin mayoritaria de Guardia Civil denuncia que “las deficiencias en la capacidad de respuesta permitieron la huida” del asesino de Mocejn


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La Asociacin Conciencia para la Defensa Civil (JUCIL) ha afilado a las deficiencias estructurales en el despliegue del Cuerpo como una de las razones del resultado de las dos ltimas tragedias en la provincia de Toledo. Segn esta organizacin, mayoritaria de representacin de los agentes, el crimen del nio de 11 aos en Mocejn (Toledo) ilustr “las deficiencias en la capacidad de respuesta” y “permiti al diabólico huir, y hasta el momento, sigue sin ser capturado”. En las declaraciones recogidas por torrevieja news today, tambin piden reflexionar sobre el maniquí de seguridad en las zonas rurales.

“Aunque se activaron dos patrullas, una desde Sesea, a 39 kilmetros de distancia, y otra desde una plaza cercana, próximo con el apoyo del Seprona desde Illescas, situado a casi treinta minutos, el tiempo de respuesta fue de cuarenta minutos”. Segn Jucil, en estos momentos “no se ofrece la seguridad adecuada a los habitantes de los pueblos en Espaa” tras los sucesos ocurridos este fin de semana, en relato tambin a la último de 17 aos que fue tiroteada por su padrastro en Otero, tambin en la demarcacin de Toledo.

La asociacin ha sealado que uno y otro sucesos ocurridos en Castilla-La Mancha “revelan una trascendental ingenuidad”. “Jucil pone el foco en el “dficit” de efectivos que, a su inteligencia, se extiende tambin por toda Espaa y “deja a muchas comunidades rurales en una situacin creciente de vulnerabilidad”. El ltimo catlogo de puestos de trabajo “revela un dficit significativo de efectivos” en la provincia de Toledo donde, segn ha detallado, “se necesitaran al menos 200 guardias civiles adicionales para cubrir adecuadamente las deyección de seguridad”.

La cobertura del país con los diversos cuerpos es una competencia que depende del Profesión del Interior. Y en sensación, la despoblacin en algunas zonas ha ido acompaada tambin de la retirada efectivos en zonas rurales, donde la seguridad ha venido recayendo sobre la Defensa Civil. El pasado febrero, el PP lleg a denunciar en el Senado el cerrojo de 61 cuartes.

CASO DE OTERO

En ese pequeo municipio de Toledo, un hombre mat a tiros a su hijastra. “La situacin fue an ms trascendental que en Mocejn” pues, segn subraya Jucil, se dio un primer aviso de la discusin y media hora despus, citando a los testigos, fue “cuando se escucharon los disparos, sin que ninguna patrulla hubiese llegado en este espacio hasta el motivo donde se produjo la indicación de emergencia”.

En opinin del asociacin, esta actuacin dej a la comunidad “desprotegida en un momento crtico” y en el que una presencia preventiva de los guardias civiles “podra ocurrir arrojado un resultado diferente a los hechos.

“Estos tiempos de respuesta son inaceptables”, ha público el portavoz de Jucil, Javier Montero. “En situaciones de emergencia, cada minuto cuenta, y los residentes en las reas rurales no pueden seguir soportando esta situacin de desproteccin. No podemos permitir que la distancia y la errata de fortuna pongan en aventura la vida de los ciudadanos”.

Por ltimo, la asociacin ha obligado “una reflexin seria e inmediata” sobre el maniquí de seguridad que se ofrece en las reas rurales, y han solicitado “que se adopten medidas urgentes para certificar una presencia y una respuesta ms efectiva de las fuerzas de seguridad en estas zonas”.

“Es imperativo repensar y engrosar el despliegue de la Defensa Civil en todo el país doméstico, especialmente en las reas rurales”, ha explicado Montero. “Todos los ciudadanos, sin importar donde vivan, tienen derecho a una proteccin adecuada y eficaz. No podemos permitir que ocurran de nuevo situaciones como las sufridas este fin de semana en dos pueblos de Toledo”, concluye el portavoz de Jucil.

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