La pueblo de Umbralejo, en pleno Parque Natural Sierra Septentrión de Guadalajara, recupera parte de su patrimonio, en concreto una carbonera, gracias al trabajo de dos campos de voluntariado ofertados interiormente del software ‘Verano Nuevo’ del Gobierno de Castilla-La Mancha.
La viceconsejera de Civilización y Deportes, Carmen Teresa Olmedo, ha visitado la pueblo para conocer de primera mano el resultado del campo de voluntariado que se está desarrollando en la misma.
Según informa el Ejecutor regional, se tráfico de dos campos de voluntariado que están dirigidos a la construcción de una carbonera y de diversas chozas de carboneros, a fin de crear un centro interpretativo destinado a describir la actividad tradicional del carbonero que se desarrollaba en los montes del entorno.
En total participan 32 jóvenes de diferentes partes del cosmos terráqueo, que están organizados en torno a dos campos de trabajo: uno realizado entre el 1 y el 15 de agosto, al que acudieron jóvenes de origen gachupin; y otro que está teniendo división actualmente, concretamente entre el 17 y el 31 de agosto, y en el que concurren jóvenes de origen internacional.
En entreambos casos, las actividades principales se desarrollan durante las mañanas y por las tardes se llevan a punta diferentes talleres. La programación se completa con distintos itinerarios por el entorno y otras actividades de convivencia y animación.
Entre las actividades complementarias se realizan rutas de senderismo, visitas a localidades cercanas como Valverde de los Arroyos, Galve de Sorbe o Cogolludo; talleres de iniciación a la ornitología, de lucha contra la ‘basulareza’, de rastros y huellas o de sonidos de aves, entre otros.
La viceconsejera de Civilización y Deportes ha puesto en valencia la importancia de estas actividades, no solo a la hora de recuperar nuestro patrimonio, sino como medio para concienciar a la pubescencia de la obligación de conservar los factores sociales, medioambientales e históricos que nos constituyen como región.
El pueblo de Umbralejo se encuentra en el Parque Natural Sierra Septentrión de Guadalajara. A pesar de formar parte de los Pueblos Negros y encontrarse en un enclave natural destacado, con capital interesantes de los que subsistir, Umbralejo sufrió a lo derrochador del siglo XX un proceso de defección continuado hasta estar totalmente deshabitado.
En 1984 tuvo división el inicio del Software de Recuperación de Pueblos Abandonados, promovido por la Corporación de Comunidades de Castilla La Mancha y los ministerios de Educación, Civilización, Deporte, Medio Círculo y Fomento.
Carmen Teresa Olmedo incluso se ha referido al resto de los campos de voluntariado que se están celebrando en otros puntos de la geodesía regional interiormente del software ‘Verano Nuevo’ y que, a su litigio, persiguen un objetivo similar al de Umbralejo: «recuperar el patrimonio o fomentar la civilización».
En este sentido, ha recordado que, sumados a los dos de Umbralejo, son un total de seis los campos de voluntariado ofertados, en los que participan hasta 118 jóvenes. Dichos campos de voluntariado se encuentran en la provincia de Toledo y todos los participantes se alojan en el Castillo de ‘San Servando’.
Fuera del distrito de la Comunidad Autónoma se ofertan campos de voluntariado, no solo en España, sino en destinos situados en países de Europa, Asia, África, América del Sur y Oriente Medio.