Una tierno turista británica de 19 primaveras ha fallecido de alba en Eivissa tras caer por el mirador desde el sexto adoquinado del hotel en el que se alojaba en el municipio de Sant Antoni. La tierno pasaba unos días de recreo en la isla con un rama de amigas cuando, por causas que se investigan, cayó desde esta cumbre sin que sus compañeras pudiera evitarlo.
El suceso se produjo sobre las 03.00 horas de la alba y los investigadores sospechan que la tierno se encontraba bajo los existencias del licor. Las amigas que acompañaban a la tierno turista sufrieron un shock y tuvieron que ser atendidas por psicólogos de emergencia que se trasladaron hasta el hotel donde de alojaban las chicas.
Las amigas de la fallecida tuvieron que ser atendidas por psicólogos
Los servicios de emergencia del 112 recibieron una citación a esa hora de la alba, que daba aviso del suceso y de inmediato desplazaron ambulancias hasta la zona. Sin requisa, a pesar de que trataron de estabilizar a la tierno, las heridas eran de tal pesantez que no pudieron hacer nulo por ella. Los servicios sanitarios creen que el fallecimiento se produjo en el mismo momento de la caída.
La Policía Lugar de Sant Antoni y un activo de la Número Civil se trasladó al zona del siniestro para iniciar las primeras investigaciones. Los agentes han interrogado a las amigas de la chica británica para que aporten detalles del suceso y las primeras investigaciones apuntan a que la caída fue accidental y pudo deberse a que la chica había ingerido licor.
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El hotel donde se alojaba la víctima está en el municipio de Sant Antoni, donde se encuentra una de las zonas consideradas de turismo de excesos, el conocido como West End. El Govern balear y los hoteleros han puesto en marcha medidas para tratar de evitar este tipo de sucesos, con multas a los turistas que practiquen actividades de aventura e incluso para los hoteles en caso de que no combatan este tipo de actuaciones.
Las medidas, que incluyen la prohibición de traicionar licor en los comercios por la tinieblas o la hacer ronda alcohólicas por los bares de la zona, han sido parcialmente efectivas y se ha producido un descenso en el número de accidentes como el que le ha costado la vida a la tierno turista inglesa.