«Las pruebas deberán ser declaradas nulas»


El Tribunal Superior de Justicia de Canarias (TSJC) ha informado de que se paraliza el vertido de los móviles de los canteranos del Real Madrid investigados por la difusión de un vídeo sexual de una menor de 16 años, por lo que se traba el proceso está suspendido por ahora.

El juez canario encargado del caso, Julio Wood, del Juzgado de Instrucción Número 3 de San Bartolomé de Tirajana (Gran Canaria), ha Detuvo el vertido de material. de los motivos de los cuatro canteranos investigados con el fin de estudiar y “resolver los recursos presentados” por la defensa de uno de los investigados y la fiscalía. “Las pruebas obtenidas de esta manera deben declararse nulo”«, advirtió la defensa de Raúl Asencio, uno de los futbolistas acusados.

A su juicio, “se confunde el indicio con la sospecha” y pide que se siga el criterio de la Fiscalía, limitando la información a extraer a partir del día de los hechos, la difusión de la misma por “cualquier medio”. , y las conversaciones mantenidas entre los investigados desde entonces hasta que sus teléfonos fueron incautados el 14 de septiembre. Está “emprendendo una investigación prospectiva prohibido en nuestra legislación”, declaró su abogado defensor Juan Gonzalo Ospina.

Asencio es el único que no participó en los hechos, ya que según testigos se encontraba con la tercera de las chicas en la zona de la piscina, aunque sí recibió el vídeo. En concreto, la acusación se debe a que un testigo afirma que ““Le mostró el vídeo en cuestión en su móvil”. Aunque la defensa alega que no se dan más detalles al respecto, y la información es difusa ya que es luego de recibirla de alguno de los otros investigados, pero no especifica cuál y a través de Instagram o WhatsApp sin saber especificar. la plataforma específica.

Este proceso podría resolverse Al final de la semana o a principios del próximo año y así seguir adelante con la investigación de la causa. Son acusados ​​de delitos contra la privacidad. La primera declaración ante el tribunal del acusado probablemente se realizará el 8 de noviembre.

El resto del equipo y amigos ya habían visto el vídeo.

Los hechos ocurrieron en un zona privada del Amadores Beach Cluben el municipio de Mogán, en Gran Canaria, en el que están implicados los canteranos del Real Madrid, Raúl Asencio, Ferrán Ruiz, Juan Rodríguez y Andrés García, junto con las dos víctimas, una de ellas menor de 16 años, y una tercera joven, amigo de éstos, que comparece como testigo en la causa y que estaba en el lugar aunque no aparece en los videos.

Mientras mantenían relaciones sexuales con tres de los investigados (Ferrán Ruiz, de 20 años, Juan Rodríguez, de 21, y Andrés García, de 20, del Real Madrid C), las dos víctimas Se dieron cuenta que estaban siendo grabados, ya que “al menos dos de los investigados, Ferrán y Juan, se pasaban sus móviles para grabar”. “La otra chica que figura como testigo, al ver que entraban y cerraban las cortinas en esta zona privada, se dirigió con Raúl a la zona de piscina comunitaria del Beach Club”, tal y como consta en el escrito de la defensa.

Una de las víctimas ha señalado que el futbolista que mantenía relaciones con ella Tenía mi teléfono celular en la mano durante el coito., indicándolo como origen de las imágenes. La otra víctima, por su parte, contó al Diario As en una entrevista que vio cómo uno de los chicos grababa con su móvil a su amiga, y “se lo pasaba a otro de los jugadores, como de una mano a otra”. ” .

Los denunciantes exigieron que se borraran los videos y al parecer lo hicieron delante de ellos, pero el juez ve indicios de que Los conservaron y los han distribuido a terceros.. Uno de los testigos que involucró en la causa a Raúl Asencio, del Castilla, primer filial del Real Madrid, afirmó que le mostró el vídeo de las dos jóvenes manteniendo relaciones sexuales con los tres jugadores desde su móvil cuando ambos estaban juntos. , tras recibirlo de algún otro de los investigados a través de Instagram o Whatsapp.

Se desconoce por el momento si los jóvenes acusados ​​enviaron el video en el lapso de tiempo entre su grabación y las víctimas que solicitan su eliminación o si por el contrario dijeron que la borrarían y no fue así, sino que la grabación circulaba desde hacía semanas en redes sociales y de mensajería antes del momento de la denuncia.

Aunque los hechos ocurrieron a mediados de junio, la menor y su madre explicaron a la Guardia Civil que hasta el momento no habían tenido conocimiento de que esas imágenes existieran y estuvieran siendo difundidas. Fue el actual novio de una de las víctimas quien dio a entender que había visto un vídeo de ella manteniendo relaciones sexuales. En ese momento, la menor, acompañada de su madre, vino a formalizar la denuncia en el cuartel de Santa María de Guía.

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