España sigue rompiendo todos los récords de turismo. Cada vez nos recepción más muchedumbre, y eso lo notan mucho en el sector. Según el INE, las pernoctaciones en establecimientos hoteleros aumentaron un 2,2% en julio respecto al mismo mes de 2023. El Índice de Precios Hoteleros subió un 7,2% en tasa anual, y los hoteles facturaron 140,50 euros de media por habitación ocupada, lo que supone un 8,0% más que en julio del año precursor. A veterano demanda, más suben los precios. Y todavía lo notan los ciudadanos españoles, cada vez más cansados de la situación.
El problema de la masificación está en muchas ciudades de nuestro país, aunque hay algunas especialmente desbordadas de turistas, por ejemplo, Valencia. A este oportunidad han llegado hoy casi 9.000 pasajeros en dos mega cruceros. Muchos vecinos se quejan del exceso de turistas. “No aportan falta, vienen cuatro horas comidos y bebidos”. Opiniones de todo tipo, otros creen que es bueno para la ciudad porque dejan hacienda. La alcaldesa propone prohibir la venida de este tipo de embarcaciones a partir de 2026.
En otras, como Sevilla, no hay cruceros, pero sí muchos turistas. “A mí me gusta que haya muchedumbre que venga a ver las cosas tan bonitas que tenemos”, dice una vecina de la haber andaluza. Mientras que otra cuenta cómo, cansados del ruido, arrojaron cubos de agua a unos turistas británicos en el judería de Santa Cruz.
En Málaga se quiere cobrar una tasa a los pisos turísticos. La patronal está de acuerdo, pero exige detallar una serie de condiciones. Lo que está claro es que cada vez son más los ayuntamientos que buscan poner límites al turismo masivo.
Nos vamos al ártico, concretamente a Santiago de Compostela. Allí empiezan hoy a trabajar los medidores de ruido. Los vecinos piden, sobre todo, tranquilidad y educación a los visitantes.
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