Debuta como portavoz en el Congreso tras Después de haber sacado a la calle a entre 40.000 y 60.000 personas el domingo contra la amnistía y dos meses después del revés en las urnas, que consiguieron una victoria insuficiente para llegar a La Moncloa, por la necesidad de dos aliados, Vox y PNV, que eran y son incompatibles entre sí.
Propuesto como candidato por el Rey Felipe VI, El líder del PP ha cosechado 172 apoyos, sumando al PP los 33 votos de Vox y los dos diputados de Coalición Canaria y Unión Popular Navarro. Está a cuatro votos de la mayoría absoluta, con 176, y tiene más noes (179) que sí. El giro de guion depende del PSOE
Así las cosas, y pese a los insistentes intentos de atraer al PNV, el único giro del guion depende de la bancada del PSOE. El Partido Popular ha pedido explícitamente a los socialistas que se oponen a que Pedro Sánchez acuerde una amnistía con el movimiento independentista catalán a romper la disciplina electoral. Este hipotético escenario, que desembocó en acusaciones de transfuguismo y corrupción para el PP, es sin embargo muy complejo y no exige optimismo en el seno del PP, ya que en el Congreso la amnistía del sí o del no no se votará el miércoles ni el viernes, pero la elección de Feijóo como presidente.
ruido interno
En cualquier caso, e independientemente del resultado aritmético, Feijóo se la juega en el Congreso, tras semanas de ruido interno en el PP, por un resultado electoral inesperado y cuando le espera un futuro incierto como líder de la oposición o candidato en unas elecciones repetidas. El PP, que enalteció a Feijóo y le dio aura de figura indiscutible, lleva dos meses introspectivamente analizando qué salió mal el 23 de julio.
Entre las conclusiones más compartidas está el lastre que representaron los pactos con Vox, especialmente entre las mujeres, el voto de los pensionistas, temerosos de los recortes, o el exceso de confianza demográfica. Algunos critican también la gestión mediática de la amistad de Feijóo con el narcotraficante Marcial Dorado, que el PSOE devolvió al debate público.
Aunque ha perdido su condición de mirlo blanco del PP, los líderes territoriales protagonizaron este domingo un cierre de filas con Feijóo. Además, en la formación hay cautela a la hora de interrogar a Feijóo en primera persona, una vez superado el trauma que supuso apartar a Pablo Casado del liderazgo. En cambio, los reproches sí llegan a algunos de sus fichajes, como el de Borja Sémper, criticado por hablar en euskera en el Congreso.
Una mayoría parcial
En la Cámara Feijóo tendrá que confirmar ante los suyos que sigue siendo la mejor opción para el PP, incluso cuando sus llamamientos al PSOE, su intención, luego rectificada, de hablar con Junts, o su “bilingüismo cordial”, con menos prestigio, son cuestionadas. dentro de la M-30 que en la periferia. A sus espaldas, Feijóo cuenta con cuatro mayorías absolutas en Galicia y lo que él mismo ha definido como “mayoría parcial” en las elecciones generales. Sin embargo, ni ese argumento, ni la defensa del Gobierno más votado, ni la oferta de gobernar sólo dos años para acometer pactos de Estado, servirán para equilibrar los números.
En primer lugar
Alberto Núñez Feijóo es, y así lo recuerda su pueblo, el primer candidato del PP que gana en el primer intento unas elecciones generales, y ha defendido que es su deber democrático dar voz a los once millones de españoles que votaron a Cambio político en España.
Hoy, en el Congreso, con todos los focos sobre él, tendrá la oportunidad de hacerlo en un debate en el que, como en Galicia, podrá hablar sin límite de tiempo y marcar el ritmo a sus adversarios políticos.
Si en la segunda votación, el próximo viernes, el Congreso rechaza su candidatura a la presidencia, como estaba previsto, volverá a llegar la incertidumbre, si España acude a nuevas elecciones o si Sánchez logra un nuevo mandato, de duración indefinida.
El guión de Feijóo
- El pleno del Congreso comienza a las 12:00 horas con la intervención de Feijóo.
- Tras el discurso, el presidente del Congreso programará la reanudación del pleno para primeras horas de la tarde.
- La sesión de investidura se reanudará con la intervención de los representantes de los grupos parlamentarios, por orden de mayor a menor, aunque el PP, como partido del candidato, cerrará las intervenciones.
- Las primeras intervenciones de los portavoces o diputados de los grupos parlamentarios tienen una duración máxima de 30 minutos y Núñez Feijóo podrá responderlas de uno en uno o por grupos.
- La segunda intervención de los grupos parlamentarios será de 10 minutos.
- Los grupos que entrarán en el debate de la tarde no serán todos, dependerá del tiempo que aproveche Feijóo para responder.