Saltan al mar en el banda de la frontera marroquí, en los espigones de las primeras rotondas a Castillejos, y van a nadando, bordeando todas las defensas del Tarajal a la playa en Ceuta. Cientos de chavales lo están intentado para asistir a la Ciudad Autónoma. La mayoría menores que buscan ser trasladados luego a la península. La delegada del Gobierno, Cristina Pérez, califica esta presión migratoria de «extrema» y cuantifica hasta 500 intentos de entrada a nadando en suelo gachupin. «Hay picos en los que se llega hasta las 700 personas», añade la delegada.
Fuentes consultadas por torrevieja news today explican que hay un importante operante de rescate puesto en marcha por parte de la Centinela Civil. «Nuestro trabajo es evitar que se ahoguen», señalan estas fuentes. No solo está en esta zona desplegado el Servicio Transatlántico con las correspondientes patrulleras, sino además el Categoría de Actividades Subacuáticas (GEAS) y un dispositivo terráqueo con efectivos de la Comandancia de Ceuta, así como refuerzos del Grupos de Respuesta Rápida (GRS).
Todo para controlar un masa de llegadas que, hasta el momento, Marruecos está logrando contener. El presidente de Ceuta, Juan Jesús Vivas (PP), ha explicado que solo la pasada oscuridad, el país vecino controló un intento de lanzarse de más de 350 personas. El Gobierno de España ha ido más allá con los datos. La delegada del Gobierno ha agradecido en rueda de prensa que esta pasada oscuridad se han producido 1.500 intentos de entrada ilegal en Ceuta.
Amparados por la niebla, que impide la visibilidad de las autoridades, algunos consiguieron entrar, siendo detenidos en la playa. Los grupos de nadadores fueron llevados la frontera y devueltos a Marruecos. «No solo están desplegando los medios para contener esa migración que viene a Ceuta, sino que además están admitiendo a esas personas que, una vez en la ciudad, deben ser devueltas a su país de origen«, ha señalado Pérez, sobre la colaboración con Marruecos.
Eso con las instalaciones del Centro de Estancia Temporal de Inmigrantes (CETI) muy por encima de su capacidad. Tiene 800 residentes pese a tener 512 plazas. Sin contar los menores, que están un 422% por encima de la capacidad de acogida. Ceuta tiene como cupo de acogida 80 menores, pero la sigla supera los 450. «Existen instalaciones que se pueden habilitar para acoger a menores y en ello estamos trabajando», ha afirmado la delegada.
Pese a que los intentos de llegadas son masivos, sobre todo en la última semana, las devoluciones van con tardanza. La Delegación del Gobierno explica que al día se deportan entre 150 y las 200 personas, en virtud del convenio que permite a las autoridades españolas trasladar de regreso a su país a los varones marroquíes que llegan de forma irregular a Ceuta.
De este modo, Cristina Pérez insiste en que la presión migratoria que sufre Ceuta actualmente «es extrema y muy elevada» y que pone a prueba el sistema que conforma la ciudad.