El palio de cajón, medio siglo de la recuperación en Córdoba de un estilo clásico


Un palio es un techo que cubre a la imagen de la Desconocido con unas caídas con forma dentada y airosa. ¿Siempre? En la Semana Santa de Córdoba, desde hace poco más de un cuarto de siglo hay otras formas. Fue la venida del palio de cajón, del de las caídas de forma recta y más severa.

El llamado estilo clásico fue en la Semana Santa de Sevilla propio de hermandades serias. En Córdoba no había testimonios gráficos de palios anteriores a 1937, pero los que llegaron a partir de entonces tenían casi siempre forma dentada y caídas que correspondían con los entrevarales.

El primer palio de cajón de la Semana Santa de Córdoba fue el de la hermandad de la Expiración, que primero cobijó a María Santísima del Silencio y luego, cuando la imagen regresó a los pies del Cristo, a Nuestra Señora del Rosario en sus Misterios Dolorosos. En un santiamén comenzó a bordarse con diseño de Fray Ricardo de Córdoba.

En aquellos primaveras pocas cofradías tomaban un estilo serio, pero el posterior fue el de Nuestra Señora del Maduro Dolor. La titular del Calvario volvió a salir, a posteriori de muchos primaveras, a comienzos de los 80, y lo hizo con el mismo conjunto que ahora.

Es un palio de cajón por tener una caída uniforme, sin correspondencia con los entrevarales, aunque terminado en pequeñas formas redondeadas. El estilo con que ha caminado desde entonces, desde la candelería hasta la música, se ha identificado con la seriedad.

Aunque sus caídas no sean de terciopelo todavía tiene ese forma recta el de María Santísima Nazarena, diseñado por Andrés Valverde. Cuando en 1995 se incorporó al Viernes Santo Nuestra Señora del Desconsuelo en su Soledad su cofradía del Santo Sepulcro todavía creó un palio de corte íntegro, y a´si ha continuado.

El zaguero en incorporarse es el de María Santísima de la Caridad, que estrenó el flagrante el Martes Santo de 2003, con un conjunto de cajón muy clásico en terciopelo rojo. Ese mismo año llevó la caída delantero bordada por Francisco Pérez Artés con diseño de Rafael de Rueda. Como en todos los casos, se acompañan de varales de corte fino y íntegro, a muestrario con el conjunto.

La hermandad del Perdón tuvo un intento entre 2011 y 2015 con un palio rojo de corte íntegro y final redondeado para María Santísima del Rocío y Lágrimas, que se sustituyó en 2016 por el nuevo plan por Álvaro Abril, que sigue ejecutándose.

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