«En hostelería también hay horarios». Parece una máxima tan obvia como fácil de entender, pero no siempre es así. “Seguro que no os extrañaría que no os hubieran abierto la puerta de un banco o del médico”, defiende una hostelera de Valencia, indignada por las críticas que le hace una clienta enfadada porque no le han dado cinco minutos para cenar después de que la cocina cerró. del establecimiento
Él Grupo Villa Indiano, que goza de notable popularidad en la localidad de Burjassot, ha puesto las cartas sobre la mesa en cuanto a las demandas de algunos clientes para ser atendidos a pesar de que la jornada laboral de los empleados ya ha concluido, un debate que mantiene al sector encendido. De esto trata la última publicación en redes sociales de la influencer valenciana Jesús Soriano (‘Soy camarero’), que incluye la crítica negativa de este usuario que se mostró irritado con la decisión del restaurante de no ofrecerles comida.
«Un domingo de agosto llegaron dos personas a las 22:05 cuando veníamos de Valencia en tren y no nos han dado de cenarla cocina cierra a las 22:00 y siendo fiestas del pueblo y estando todo lleno, nos parecio muy mal servicio que nos mandaran al centro sabiendo que estaba todo completo, un detalle muy feo, es la primera vez algo asi esto me ha pasado a mí”, defiende el ‘crítico’ que califica la comida, el servicio y el ambiente con una estrella sobre cinco, a pesar de que no cenó en el local.
Minutos después, el dueño del restaurante dio su versión en una respuesta aplaudida por los seguidores de @soycamarero. “Quizás es la primera vez que te pasa algo así, Maitane, pero esperamos que no sea la última y que al final te acabes acostumbrando”, comienza con fuerza. «En Villa Indiano creemos que en hostelería también hay horarioscomo en cualquier lugar, y que sean tanto para usuarios como para trabajadores”, argumenta.
“Nuestro horario de atención es público, está en la web, en un cartel en la entrada y en nuestras pantallas informativas”, le recuerda el encargado del bar. «Entendemos lo mal que se siente llegar a un lugar y que por minutos no te atienden, pero seguro no te sorprendería que no te abrieran la puerta en un banco O en el médico, ¿verdad? “Él continúa.
«Sin embargo, tenemos que tener el horario que te conviene y por no hacerlo merecemos todo tu desprecio, claro, por eso tienes un perfil anónimo que solo usas para dar una estrella a los lugares que no te gustan y intentar daña tu reputación», esgrime visiblemente enojado.
«Bravo, las casi 50 personas que aquí trabajamos os agradecemos vuestra empatía y os aplaudimos, y de paso, también a Google, que sin dudarlo permite estas intercambios escritos tan degenerados…”, finaliza.
Los comentarios a la publicación no se han hecho esperar y algunos usuarios de Twitter simplemente se “quitan el sombrero” ante la actuación del hostelero en defensa de sus trabajadores. “Pues aunque su intención es dejar mal el restaurante, creo que le ha ido mal. Leo esa reseña y pienso: un buen lugar para comer», apunta otro seguidor. “Los que entran cinco minutos antes del cierre es para saber dónde trabajan y van un minuto antes a ver si les gusta salir más tarde”, apunta un último ‘seguidor’.