Un niño rompe una pieza de una antigüedad de 3.500 años y no recibe ningún castigo por ello


¿Qué crees que pasaría si vas a un museo y rompes una alcoba? Lo más seguro es que te toque abonar el cuantía de su restauración, ya que al ser una alcoba monopolio tiene un valencia decano del que cualquier persona pudiera enriquecer, lo que conllevaría un tranquilo problema. Pero en Israel, en función de las causas que hayan llevado a la rotura de la alcoba, no es así.

Esto ocurrió el pasado viernes en el Museo Hecht de Haifa, cuando un crío de cuatro abriles rompió accidentalmente un valioso frasco de 3.500 abriles de pasado. La alcoba, que databa de la Momento de Bronce entre 2.200 y 1.500 a.C., había estado en exhibición durante 35 abriles antaño del incidente. El director del museo creyó que, al ser un crío, se trataba de un azar ya que la curiosidad de los más pequeños no tiene límites.

El pequeño fue a pasarse el museo con su tribu, y, movido por la curiosidad de lo que había en su interior, “tiró tenuemente del frasco” para ver qué contenía, lo que provocó que se volcara y acabara por romperse. Alex, el padre del crío, relató que quedó “en shock” al ver a su hijo pegado al frasco roto, en un principio pensó que no fue su hijo quien lo hizo.

“No tengas miedo”

Pensaban que tendría que enriquecer el valencia del frasco, pero sorprendentemente, la respuesta del museo fue comprensiva. El doctor Inbal Rivlin, director del museo, tranquilizó al crío diciendo: “No tengas miedo, no tenemos ningún aliciente contra ti”, tal y como informa Sky News.

La razón de no castigar al crío fue porque, en función de las causas que hayan llevado a tirar las piezas expuestas, puede implicar una consentimiento u otra. Y en este caso creyeron que, al considerarlo un azar, no debería conllevar una pena.

“Hay casos en que los objetos expuestos se dañan intencionalmente y esos casos se tratan con gran severidad, incluso involucrando a la policía”, explicó Lihi Laszlo, apoderado de contenidos del museo. “Pero en este caso no fue así. El frasco fue dañado accidentalmente por un crío pequeño que visitaba el museo, y la respuesta será coincidente a ello”, añade.

No tenía barreras de protección

El frasco roto era una alcoba arqueológica de valencia. Descubierto en Samaria, en el centro de Israel, es mencionado a la época de los reyes bíblicos David y Salomón. Los funcionarios del museo creen que probablemente se utilizaba para transportar suministros como caldo y óleo de oliva. Su estado completo lo hacía especialmente valioso, ya que muchos hallazgos similares suelen estar rotos o incompletos al ser desenterrados.

El museo ha designado a un experto en conservación para restaurar el frasco y planea devolverlo a su dominio de exhibición “en poco tiempo”. A pesar del azar, los funcionarios del museo afirman que continuarán con su tradición de exhibir artículos “sin barreras ni paredes de vidrio“, en ringlera con el objetivo del fundador del museo de hacer que los artículos sean lo más accesibles posible.

Los administradores creen que hay un “encanto singular” en mostrar los hallazgos arqueológicos “sin obstrucciones”, por lo que el frasco estaba expuesto cerca de la entrada sin protección de vidrio. Sin secuestro, el doctor Rivln advierte a los padres que es posible que tengan que dar instrucciones a sus hijos antaño de pasarse el museo para que no toquen las exhibiciones a menos que se indique explícitamente que está permitido hacerlo.

Síguenos en nuestro canal de WhatsApp y no te pierdas la última hora y toda la ahora de antena3noticias.com

bebes gaza

Leave a Comment

Your email address will not be published. Required fields are marked *