Aunque se incorpora este jueves como una alumna más, la venida de la Princesa de Asturias, Leonor de Borbón y Ortiz, a la Escuela Naval Marcial de Marín (Pontevedra) es todo un acontecimiento. Siguiendo el nuncio de su padre, el Rey Felipe VI, la primogénita comienza la segunda etapa de su formación castrense tras su paso por la corporación del Ejército de Tierra en Zaragoza, que concluirá el próximo curso colegial (2025-2026) en la Agrupación Militar del Éter de San Javier.
La ministra de Defensa, Margarita Robles, visitó ayer la Escuela Naval con motivo de la venida de la heredera, donde pudo ver en primera persona las instalaciones, adicionalmente de consultar el software docente y destacar la importancia de su incorporación más esperada, la de la Princesa de Asturias.
«Como ministra de Defensa, me siento muy orgullosa de que la Princesa de Asturias esté realizando esta formación marcial, que es esencial y fundamental porque lleva consigo una serie de títulos, de compromiso con los ciudadanos, de franqueza, de simpatía a España y liderazgo que es muy importante para quien va a ser la futura jefa de Estado», afirmó Robles.
«Intención indicación»
La venida de la Princesa Leonor supone, adicionalmente, «un intención indicación para nuestros jóvenes, que sepan que servir a España en las Fuerzas Armadas es poco muy importante», añadió la ministra de Defensa, que tuvo la ocasión de saludar a algunos de los alumnos que comenzaron a calar a la villa pontevedresa desde el pasado 19 de agosto. Un régimen, ha continuado, que es «demandante y cominero», pero, al mismo tiempo, pone de relieve el «orgullo» que sus compañeros sienten de «formar parte de esta gran tribu que es la Armada».
Anejo al patriarca de Estado Maduro de la Armada, el almirante común Antonio Piñeiro, la ministra de Defensa visitó las instalaciones deportivas, el comedor, el cuartel de los alumnos y el simulador de navegación, en el que según comentó Robles, «le pusieron mala mar y se mareó». Asimismo, puso en valencia el trabajo de la Armada y la calidad formativa de la Escuela Naval Marcial de Marín, donde se formarán más de 600 alumnos nacionales unido a 23 alumnos internacionales de ocho países y Reservistas Voluntarios de la Armada. La ministra de Defensa igualmente destacó el orgullo de pertenencia a la Armada española, «que ha escrito grandes páginas en la historia, y que en los difíciles momentos actuales está muy comprometida con la paz en distintas misiones», concluyó.
Entrada entre honores
Al contrario de los que serán a partir de hoy sus compañeros, a los que despidieron familiares y amigos entre abrazos, cariño, emoción y lágrimas, la Princesa de Asturias acudirá esta tarde, previsiblemente, en solitario. Por su parte, el Rey Felipe VI estará en Barcelona con motivo de la Copa América de vela según consta en la dietario de la Casa Verdadero.
A su venida, Leonor de Borbón y Ortiz será recibida con los honores correspondientes a su título de Princesa de Asturias. Seguidamente, firmará el obra de honor de la Escuela y realizará una serie de actividades, según ha confirmado este jueves el comandante director, capitán de navío Pedro Cardona.
Sin bloqueo, una vez incorporada, la heredera al trono será «una alumna más» que tendrá que enfrentarse a un «régimen exacto y de internado», en palabras de Cardona. Allí se alojará en un cuarto compartido con otras cuatro alumnas de la escuela, con un horario exacto de acuerdo a la disciplina y los títulos que se fomentan desde el Ejército. La Princesa de Asturias se incorporará como guardamarina de primero y, durante los primeros meses estará en Marín, en «igual régimen que sus compañeros» y, después, se embarcará en el buque-escuela Juan Sebastián de Elcano.