El caso que ha mantenido en vilo a España y Colombia durante el zaguero año ha llegado a su desenlace sumarial. Daniel Sancho, hijo del actor Rodolfo Sancho ha sido condenado a condena perpetua por el tribunal tailandés tras ser considerado culpable del homicidio premeditado del cirujano colombiano Edwin Arrieta. La sentencia, que inicialmente contemplaba la pena de crimen, ha sido corta a condena perpetua por su colaboración durante el proceso de investigación.
Los hechos se remontan al 2 de agosto de 2023, cuando Sancho y Arrieta se encontraban en un bungaló de la isla tailandesa de Phangan. Lo que parecía que iban a ser unos días de desconexión, acabó en un trágico suceso. Según las investigaciones, Sancho acabó con la vida del cirujano tras una pelea, golpeándolo y seguidamente cortándole el cuello. El cuerpo, descuartizado, fue opuesto días a posteriori en un vertedero y en el mar, empaquetado en bolsas negras.
Proceso sumarial
Durante el inteligencia, que se llevó a sitio entre abril y mayo de 2024, se presentaron numerosas pruebas y testimonios. La Fiscalía tailandesa logró demostrar la premeditación del crimen, aportando evidencias como la transacción previa de cuchillos y bolsas de basura por parte de Sancho.
En estos, a pesar de los intentos por parte de la defensa de argumentar que se trató de un homicidio imprudente, el árbitro ha dictado la sentencia a las 10 de la mañana (hora tailandesa) determinando la culpabilidad de Sancho no solo por el homicidio, sino incluso por el descuartizamiento y la destrucción del pasaporte de la víctima.
Posibles cárceles
Las prisiones tailandesas son conocidas por sus duras condiciones, especialmente para los reclusos extranjeros.
Actualmente, Sancho se encuentra recluido en la calabozo de Samui, donde ha permanecido en prisión preventiva durante el zaguero año. Es una prisión de seguridad media donde las condiciones de vida, aunque duras, son consideradas menos severas que en otros centros del país. Hay un total de 542 presos en el centro.
- Las celdas suelen estar sobrepobladas, con espacio restringido para cada recluso. Pasan más de 14 horas internamente de ella.
- Los presos deben trabajar durante el día en diversas tareas asignadas.
- La viandas es básica y dependen en gran medida de los suministros que puedan acoger de sus familias.
- El comunicación a la atención médica es restringido.
- No hay internet pero disponen de una televisión en las zonas comunes.
- Hasta las 16:00 se puede hacer deporte, ir al recinto o acoger visitas.
Sin requisa, su destino final está se definirá a posteriori de las apelaciones a la audacia final del árbitro. Estas son las posibles cárceles a las que Daniel Sancho podría sobrevenir el resto de su vida.
Si Sancho supera los 15 primaveras de condena podría ser trasladado a la prisión de Surat Thani. Es más egregio y con un régimen más fiel, que la de Samui, aunque todavía no se considera de máxima seguridad. En este centro se encuentran presos condenados a condena perpetua o de crimen por delitos “muy graves”. Estiman que hay 5.400 reclusos, el doble de su capacidad.
- Sobrepoblación en las celdas con más de vigésimo reclusos en la misma. No tienen camas.
- Comunes registros policiales dejado a los presos semidesnudos y con las celdas revueltas.
- Hay menos flexibilidad con las visitas y comunicaciones con el foráneo: no permite el contacto físico y solo pueden inspeccionar aquellos con parentesco de consanguinidad.
La calabozo de máxima seguridad de Nakhon Si Thammarat sería el destino final de Sancho si cumple más de 25 primaveras de condena. Conocida por tener los delincuentes más peligrosos del país y tiene el régimen más fiel del sistema penitenciario tailandés. Con más de 4.200 reclusos.
Hay que esperar a las apelaciones
A pesar de la sentencia, el caso de Daniel Sancho aún no está completamente cerrado. Tanto la comunidad del pronunciado como la de la víctima tienen un plazo de un mes para presentar apelaciones. Este proceso podría tirarse hasta un año, durante el cual Sancho permanecería en la calabozo de Samui.
La defensa de Sancho probablemente buscará compendiar la sentencia, argumentando que no hubo premeditación en el crimen. Por otro banda, la comunidad de Arrieta podría agenciárselas una compensación económica o incluso presionar para que se reconsidere la pena de crimen.
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