Disculpas a medias del edil que deseó que el alcalde de Ponferrada no hubiera nacido


El socialista admite que su mensaje fue «desafortunado», pero carga contra los «que se sienten »ofendidos«

Andrés Gabella, concejal socialista en el Junta de Ponferrada

Diego L. González

PONFERRADA

Una disculpa, que suena a ello, pero que más perfectamente parece una disculpa a medias. El concejal socialista en el Junta de Ponferrada, Andrés Gabella, volvió a utilizar las redes sociales para solicitar perdón por el mensaje que antaño había escrito en X, antaño Twitter, en el que deseaba que no hubiera nacido el corregidor de la caudal del Bierzo, Entorno Morala (PP), y que su existencia se habría evitado «con un preservativo». En un hilo formado por dos textos, Andrés Gabella plantea su convicción de que «no vale todo en política» y añade que no tiene inconveniente «en pedir disculpas por un tuit desafortunado».

Pero más allá de esa solicitud de indulgencia, el representante socialista parece reactivar otras críticas contra el corregidor del sexto municipio de Castilla y Valeroso y, en genérico, contra el Partido Popular. Entre sus consideraciones, Gabella señala que ojalá «quienes se sienten ofendidos ahora tuvieran la misma vara de contar en todas las ocasiones». A partir de ahí, el concejal expone y recuerda que los socialistas son «insultados gravemente en los plenos y el corregidor calla».

Y añade que los representantes del PP siquiera «abrieron la boca para denunciar esos insultos y cuando tiraban matanza en la sede del PSOE en Ponferrada». Alude así a uno de los episodios vividos meses a espaldas, en las concentraciones de protesta contra las políticas del Gobierno Central delante sedes socialistas de España.

En este caso, se lanzó un limpio rojo a la presencia del edificio. Un prospección que pidió el propio Partido Socialista constató que era matanza de un animal. Posteriormente de esa indicación, Andrés Gabella concluye señalando que «ampararon con su silencio y su presencia aquellos terribles hechos y ni se disculparon, ni lo harán».


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