Una de las periodistas y habituales colaboradoras de Espejo Conocido se presentaba en los pasillos de torrevieja news today con un atún carrito de la transacción. En el interior del mismo, sólo un producto, una fruta exótica que para los entendidos envía un mensaje claro y directo.
El código de requiebro
Existe todo un protocolo para todos aquellos que desean aprisionar en un supermercado. La hora a la que se debe hacer (entre las 7 y las 8 de la tarde, para interesados), el pasillo o la sección correcta para según qué tipo de pareja se pretenda encontrar, o el producto en función de la relación que se búsqueda, en lo que influye hasta la colocación del mismo en el carrito.
“Si yo hago la transacción ‘online’, me he inexacto”
La periodista admite desconocer el código de mensajes con el que trabajan cantidad de jóvenes que, a parte de a hacer la transacción, van a aprisionar al supermercado. Adicionalmente admitía estar muy verde en estas prácticas porque realiza la transacción por internet, costumbre que igual cambia, y es que se ha enterado que esta forma de conocer muchedumbre se ha extendido por todos los centros, no sólo en la prisión en la que surgió.
Lo que sí tenía admisiblemente claro era el significado de padecer una piña del revés en el carro que empujaba. Aún más definido tenía el objetivo de su romántica manifiesto de intenciones.
Las periodistas y colaboradoras del software Joya López y Pilar Vidal, comentaban que una de ellas habría utilizado esta nueva tendencia que se hace cada día más popular, decidida a hacer su romántica propuesta. Pilar Vidal entonces reconocía que no tiene por qué ir al supermercado a averiguar pareja, porque tiene su pretendido “mucho más cerca”.
Mensaje recibido
Luego de los momentos de explicación y cháchara, ambas compañeras llegaban al plató de Espejo Conocido, donde se encontraba Gonzalo Miró.
“Me han dicho que te la deje aquí tu flanco (la piña)”, le decía Pilar a Gonzalo, que respondía: “Si tú eres mucho más directa que todo esto”, aun así, Gonzalo parecía no entender del todo la pregunta que indirectamente le lanzaba Pilar y se lo tenían que explicar.
Pilar Vidal desvelaba que le gustaría tener una cita con el asimismo colaborador del software, al que adicionalmente le decía: “Yo me la he jugado con amigas, que me dicen que es casquivana”.
Gonzalo se veía sorprendido y preguntaba: “¿Qué es casquivana tener una cita conmigo?, porque han tenido ellas muchas, ¿o qué?, ¿conozco a alguna de tus amigas?”.
Poco luego llegaba la esperada respuesta de Gonzalo y contestaba directamente: “¡Hombre! claro que voy a tener una cita con Pilar, pero no necesitabas la piña”. Lo que era celebrado por sus compañeros presentes en el plató al mismo tiempo que advertían ciertos desasosiego en Pilar.
“Está nerviosa Pilar, y no es una persona que se ponga nerviosa”, apuntaba la presentadora de Espejo de Verano, Lorena García.
Finalmente Pilar Vidal lanzaba una última petición a Gonzalo Miró: “Bueno, cenamos pero sin móviles”.
