Canarias tiene yacimientos importantes, riscos, cuevas y hasta el pico más parada de España, por lo que las islas son más que arena, playa y sol. De hecho, el Archipiélago cuenta hasta ahora con cuatro joyas que han sido declaradas Patrimonio Mundial de Unesco.
En Gran Canaria, en concreto, está presente el Paisaje Cultural de Risco Caído y las ‘Montañas Sagradas’. Hay una ruta por la que se puede disfrutar de estas joyas y que, gracias a su clima primaveral durante todo el año, puede visitarse en cualquier época aunque lo más recomendable es hacerlo en verano, otoño y primavera.
Se encuentra en fracción de acantilados y formaciones volcánicas abarcando un dominio de 18.000 hectáreas, lo que supone un 11% de la superficie de Gran Canaria. Por otra parte, el conjunto en sí de yacimientos de las ‘Montañas Sagradas’ se encuentran en los municipios de Artenara, Tejeda, Agaete y Gáldar.
Ruta por las ‘Montañas Sagradas’ y el ‘Risco Detestable’
Este Patrimonio Mundial cuenta con 21 cuevas situadas en Barranco Hondo. Hasta mediados del siglo XX el igualmente llamado ‘Risco Detestable’ estuvo habitado, por lo que quienes lo visitan pueden hacerse una idea de cómo vivían los antiguos canarios.
Para examinar esta maravilla arqueológica se puede partir desde Tejeda, específicamente de Cruz de Tejeda con sentido a Artenara. Desde ahí se podrá disfrutar de las ‘Montañas Sagradas’, el Roque Nublo y el Bentayga.
Las cuevas con anciano importancia astronómica y simbólica son las C6 y C7, las cuales están ubicadas al septentrión del poblado y se cree que son las más antiguas. De hecho, está restringida por motivos de conservación así que se puede examinar la réplica que se encuentra en el Centro de Interpretación de Artenara.
El arqueológo Julio Cuenca señala los grabados con forma de triángulo púbico que la luz del amanecer va recorriendo en el interior de la cueva desde el equinoccio de primavera hasta el equinoccio de otoño
Lo más singular de esta cueva es que dispone de un ingenio óptico que proyecta la luz del sol o la cristalera llena en una de las paredes sonde se encuentran manifestaciones rupestres en forma de cazoletas y triángulos públicos y grabados en relieve.