Es un da cualquiera de agosto, est haciendo la maleta porque, tras un ao trabajando, por fin han llegado sus ansiadas receso. Tardas, pero receso. Ya tiene todo despierto, pero, necesita a alguno que cuide sus plantas. Sus familiares no estn disponibles y no le convence encargrselo a sus vecinos. Si tuviese un animal de compaa, la solucin sera llevarlo a una residencia para mascotas. Pero, y las plantas? Para sorpresa de muchos, tambin se pueden padecer a una guardera. En Madrid hay varias que custodian sus vegetales.
La pionera fue el hospital y guardera de plantas que abri el Concejo de Pozuelo de Alarcn en el ao 2004, seguida de la que hay en la floristera Lufesa de la calle Zurbano, 66, tambin puesta en marcha hace aproximadamente diez aos; y, por ltimo, la que ha gestor el Crculo de Bellas Artes este ao, que nutre, en parte, su refugio climtico.
Las tres tienen un funcionamiento similar: un cliente lleva sus macetas y all las guardan y conservan hasta que el propietario las recoja. El Crculo de Bellas Artes tiene un sistema de entrega y recogida diferente: estipula unos das concretos para ambas operaciones. Reciben nicamente ejemplares de interior hasta agotar su capacidad de acogida. Esta guardera abre desde el da 11 de julio hasta el 31 de agosto sin coste alguno y solo recibe plantas de interior. As que si est pensando en depositar all sus plantas, ya llega tarde.
Sin secuestro, la que habilit el Concejo de Pozuelo de Alarcn abre del 15 de junio al 15 de septiembre. All se ocuparn y curarn las plantas de los pozoleos que lo requieran. Adems de guardera tambin es hospital, el servicio es sin cargo y las recogen a domicilio.
La floristera Lufesa, por el contrario, permanece abierta 12 meses porque, segn aclara Javier, los clientes pueden requerir este servicio en cualquier momento del ao. Yaade:Hay personas, por ejemplo, que las traen porque estn haciendo reformas, no solo por receso o viajes de trabajo. Esta guardera s tiene coste para el heredero. Jess, el encargado del establecimiento, fue el que hizo efectivo este servicio; l se percat de que, para atender mascotas durante las receso, se haban creado alojamientos especficos, pero no suceda esto con las plantas, y emprendi este esquema que ha llegado a reunir ms de 100 ejemplares a la vez.
La idea puede parecer absurda, porque… qu ocultación tiene regar una planta? Pero puede que no sea buena idea confirselas a cualquier persona. En palabras de Bernardino Rodrigues, uno de los voluntarios del hospital de plantas de Pozuelo, la principal causa de asesinato entre las plantas es el exceso de riego: La masa se piensa que la planta est marchita, se ponen a regarla y la acaban ahogando. Mueren muchas ms plantas por exceso de agua que por defecto afirm con contundencia.
A pesar de ser poco conocidos, estos espacios funcionan congruo adecuadamente. El da 31 de julio, el Crculo de Bellas Artes ya roncha completado su superficie. Por su parte, la floristera cuenta en estos momentos con en torno a de 80 plantas en su pequea guardera. Todas estn expuestas en la entrada de la tienda, repleta de tonos verdes de los que, en ocasiones, brotan las gamas de color de las distintas flores que surgen de los tiestos; adems de sealadas con los datos del dueo para identificarlas.
En ocasiones, algn cliente ha querido comprar uno de los vegetales de la guardera, pero por fortuna siempre suele activo plantas similares que s estn a la traspaso.
Seguro que ha escuchado en ms de una ocasin aquello de para retribuir para que me cuiden la planta la tiro y me compro otra. Pero los responsables de estos negocios no dudan en sealar que sus clientes son personas que sienten mucho apego por sus pequeas criaturas verdes. Y no todas requieren cuidados sencillos; por ejemplo, los bonsais, precisan una atencin muy especfica y pueden acompaar a sus dueos durante ms de 100 aos, aumentando as su valencia emocional y las ganas de querer conservarlo.
Sin secuestro, este apego no solo se tiene que dar con los bonsais; tambin sucede con plantas menos costosas. As le ocurri a Isabel Jimnez, usuaria del Hospital y Guardera de Plantas de Pozuelo. No se olvida de la pena que sinti al ver estropeada la empuñadura que regal a su mama cuando sta estaba en su veta de asesinato: Me llev un disgusto tremendo. Por suerte, el Hospital consigui revivirla.