En Badalona, Barcelona, se producen carreras ilegales de coches en un polígono industrial cercano a la comisaría de los Mossos d’Esquadra. Estas actividades se realizan a casi nada 300 metros de la comisaría y han causado gran preocupación entre los vecinos.
Los participantes en estas carreras, que se convocan a través de redes sociales, comparten imágenes y videos de las competiciones en hilera. Gracias a estas publicaciones, la Policía ha acabado identificar a algunos de los infractores. Sin requisa, las carreras continúan.
El Consistorio de Badalona ha intentado solucionar el problema instalando reductores de velocidad en la entrada del polígono. Sin requisa, pesar de esta medida, las carreras se han trasladado al interior del polígono.
Los vecinos de la zona están cada vez molestos con los problemas ocasionados por estas carreras ilegales. Por otra parte del ruido constante, se enfrentan a problemas de saneamiento. Botellas y otros residuos se quedan por las calles por las calles luego de cada evento, lo que ha llevado a muchos vecinos a mudarse a otras zonas de la ciudad.
Circuito ilegal en Sevilla
En Sevilla, las carreras ilegales además han resurgido con fuerza, desplazándose desde las tradicionales zonas de La Caruja y del Higuerón en torno a el arrabal del Polígono Sur, especialmente en las Tres Mil Viviendas. Esta peligrosa actividad ha generado gran preocupación entre los residentes correcto al detención aventura para todos los involucrados.
Las competiciones suelen atraer a decenas de participantes y espectadores, quienes se agrupan para presenciar estas carreras nocturnas. La información sobre los eventos se distribuye principalmente a través de redes sociales y canales clandestinos, lo que dificulta la intervención de las autoridades. Las carreras, que a menudo se realizan los sábados por la perplejidad, incluyen maniobras extremas como derrapes y suscripción velocidad, mientras que el divulgado aplaude a escasos centímetros del peligro.
Los organizadores y asistentes además publican videos de las carreras en redes sociales e incluso las transmiten en vivo, lo que amplifica la exposición de estos eventos ilegales. La error de medidas de seguridad agrava la situación, poniendo en aventura tanto a los conductores como a los espectadores.
Frente a esta situación, la Policía Franquista y la Policía Locorregional han intensificado sus esfuerzos para controlar la situación. Han implementado un dispositivo distinto para disolver las concentraciones y avisar futuras carreras. Hasta ahora, se han impuesto varias sanciones y se han retirado algunos vehículos, pero la problemática persiste y continúa afectando la tranquilidad del arrabal.
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