La novia es la misma mujer que había iniciado el proceso de denuncia contra Francisco Javier Cuenca. Ella lo hizo primero antes del autoridades eclesiásticas y posteriormente ante la policia. como prueba presentó algunos vídeos cómo agredió sexualmente a sus víctimas
No se siguieron los protocolos
El portavoz del obispado de Málaga, Antonio Moreno, aseguró que se habían enterado de todo lo ocurrido este lunespero luego admitió que la mujer había hablado de esas imágenes ya en agosto. Sin embargo, se limitaron a recomendarle que acudiera a la policía en lugar de actuar para detener estos agresiones sexuales, lo que significa que actuaron rompiendo protocolos que la Iglesia marca en estos casos.
Ahora, un medio de comunicación local, Diario Sur, ha afirmado que la novia fue denunciada por el sacerdote a principios de septiembree por haber robado el disco duro que contenía las agresiones sexuales y su modus operandi, junto con 3.000 euros.
Al parecer y según los investigadores, esta denuncia fue clave en el caso ya que representa un reconocimiento de autoría de las imágenes que su pareja le había facilitado previamente. El sacerdote también admitió haber tenido un relación sentimental con la mujer y lo acusó de haber actuado para despecho al presentar la denuncia en su contra.
Al parecer la novia llevaba un largo plazo de denuncias contra el cura, ya que, según indica el periódico que ha juzgado el Obispado de Málaga, en enero la novia denunció ante el jefe de la Obispado de Málaga en Melilla lo sucedido, y presentó ante ellos las imágenes de las agresiones sexuales. Sin embargo, no se aplicó ninguno de los protocolos que es establecido por la Iglesia.
Su licencia ya ha sido revocada.
La única acción que se tomó fue una traslado del sacerdote a otra iglesia en ese mismo mes, sin embargo no fue hasta este mes de septiembre cuando el Obispado licencia retirada para que no se desempeñe como sacerdote, aunque siguen eludiendo responsabilidades.